«En lugar de ofrecer soluciones, hará los trabajos menos seguros y causará enfermedad y muerte».
El calor se ha tornado en un potencial “asesino silencioso”. No se oye, pero se siente, y con frecuencia cuando esto sucede termina en la sala de emergencias y eventualmente en la muerte. Pero esto no ocurre por igual para todos, sino sobre todo en personas de bajos ingresos cuyos trabajos al aire libre o en espacios cerrados y sofocados están expuestos a este peligro.
En Florida, un estado republicano distinguido por emitir leyes que suelen perjudicar a sus trabajadores de bajos ingresos, inmigrantes y mujeres, hoy 1 de julio entra en vigor la ley HB 433, cuyas disposiciones prohíben regulaciones locales de protección que exceden las normas federales o estatales sobre monitoreo y protección de los empleados durante climas como los del mes pasado, los más calurosos de la historia de Florida con temperaturas de tres dígitos en todo el estado, de acuerdo con Alianza Americas.
Es decir que esta ley prohibe las regulaciones para el consumo de agua y las medidas de enfriamiento en los centros de trabajo cerrados; los períodos de descanso, aclimatación y recuperación durante la jornada laboral en el campo; los avisos informativos, los programas de exposición al calor y las respuestas de primeros auxilios; las protecciones para los empleados que informan sobre la exposición excesiva al calor, y los requisitos de presentación de informes.
Giselle Rodríguez, de la Junta de Alianza Américas y Directora Ejecutiva de Trabajadores de Illinois en Acción, criticó «la falta de dignidad» de los legisladores que aprobaron la HB 433, que está imponiendo a los trabajadores al aire libre peligros extremos por la falta de protección. “… La gente morirá. Instamos a la Legislatura de la Florida a aprobar protecciones basadas en la ciencia, para que todos los trabajadores eviten lesiones y muertes».
Los trabajadores de la construcción, y particularmente de la agricultura, que son mayormente latinos, se ven afectados de manera desproporcionada a los rigores del clima extremo, siendo tres veces más propensos a morir por condiciones relacionadas con el calor en el trabajo, en comparación con los trabajadores no latinos.
Oscar Londoño, Codirector ejecutivo de WeCount, con sede en Florida, sostiene que al entrar en vigor la HB-433, «está prohibiendo que todos los gobiernos locales del estado emitan protecciones de sentido común», para millones de trabajadores que laboran al aire libre.
«En lugar de ofrecer soluciones reales, la HB 433 hará que los trabajadores sean menos seguros en el trabajo y causará enfermedades y muertes prevenibles relacionadas con el calor”, reafirmó.
Y agregó que durante años, “nuestra campaña, ‘¡Que Calor!’, ha estado sonando la alarma sobre la crisis del calor extremo y liderando el movimiento para ganar protecciones contra el calor para los trabajadores al aire libre de la Florida… Seguiremos organizándonos hasta que todos los trabajadores estén seguros en el empleo».
Alianza Americas afirma que la HB 433 forma parte de una ola nacional de legislaciones republicanas antinmigrantes, similar a la HB 2127 de Texas, que impide que las ciudades y los condados apliquen regulaciones más estrictas.
La red de Alianza Americas, WeCount y otras organizaciones apoyan los esfuerzos de la administración Biden para establecer estándares nacionales más estrictos, para hacerle frente al estrés térmico, y para establecer otras medidas de protección.