Ni un solo miembro de la Cámara de Representantes o del Senado latino está en estas platicas… una traición completa”.
En esta zona intermedia entre dos muros en la frontera de Tijuana (Mx) y San Ysidro (EU EU) quedó atrapado un grupo de solicitantes de asilo al comienzo de las solicitudes a través de la aplicación CBP One. Como metáfora del limbo o prisión en la que se hallan los inmigrantes indocumentados. Foto: Cortesía de Pedro Ríos / American Friends Service Committee.
Organizaciones comunitarias y pro inmigrantes y legisladores demócratas alzaron fuerte la voz en Washington esta semana. Rechazaron tajantemente que el gobierno de Biden acepte las demandas republicanas de endurecimiento migratorio fronterizo, a cambio de una multimillonaria ayuda militar a Ucrania. Hasta el momento, la Casa Blanca no ha cedido, pero la revuelta amenaza con dividir más a los demócratas, con posibles repercusiones electorales. Desde la ciudad de Washington, José López Zamorano nos da los detalles.
Desde la Casa Blanca el presidente Joe Biden lanzó una bomba política: anunció que aceptaría “compromisos significativos” para satisfacer las exigencias de los republicanos, de restablecer las políticas más duras de la era Trump para destrabar la ayuda a Ucrania.
“Estoy dispuesto a hacer significativamente más. Pero en términos de cambios de las políticas y de asignar más recursos a la frontera, estoy dispuesto a cambiar esas políticas también”
Las exigencias de los republicanos incluyen reimponer un programa al estilo del Título 42 para ejecutar deportaciones sumarias de migrantes, limitar el proceso de asilo y de libertad condicional humanitaria o parole, aumentar las detenciones y aplicar un programa de deportaciones expeditas, tanto al exterior como al interior de Estados Unidos.
Los republicanos tanto de la Cámara de Representantes como del Senado dejaron en claro que, sin cambios en las políticas migratorias, no existen posibilidades de que se apruebe el paquete de ayuda por 106 mil millones de dólares para Ucrania, Israel y Taiwán.
Mike Johnson, presidente de la Cámara de Representantes:
“Dejé en claro desde el día que necesitamos un cambio transformador en la frontera. Nuestra primera condición para un paquete de emergencia es poner nuestra seguridad fronteriza primero”
La aceptación de Biden, de negociar el endurecimiento de la política migratoria y fronteriza con Johnson, a cambio de la ayuda foránea, detonó una revuelta en las filas demócratas.
Nannete Barragán, presidenta de la Fracción Hispana de la cámara baja:
“Estamos aquí para pelear… Estamos aquí para decirle al presidente Biden y al líder del Senado, Charles Schumer, que rechacen las propuestas migratorias y fronterizas republicanas en las negociaciones presupuestales”
Para complicar la situación, a las negociaciones a puertas cerradas entre los republicanos del Congreso y la Casa Blanca no fue invitado ningún representante o senador de origen hispano, a pesar de que hicieron la petición personalmente al jefe de Gabinete de la Casa Blanca, se quejó el senador cubano americano Bob Menéndez.
“Ni un solo miembro de la Cámara de Representantes o del Senado de origen hispano está en la mesa durante estas platicas… Esto sería una traición completa”
Entre los legisladores críticos de la Casa Blanca figuran además los senadores Alex Padilla y Dick Durbin, así como los representantes hispanos Verónica Escobar, Sylvia García, Joaquín Castro, Jesús “Chuy” García, Greg Casar, Bob Menéndez y Delia Ramírez, entre otros.
Nancy Flores, vicepresidenta de la Alianza Nacional de Nuevos Americanos, una coalición de 69 organizaciones que rechaza las posibles cesiones de Biden, señala que la rebelión de los demócratas no sólo puede afectar el desenlace legislativo, sino perjudicar política y electoralmente al presidente Biden y a los demócratas.
“Su base está dividida en muchos asuntos, pero en realidad, en cuestión de cálculo político, no les conviene hacer enojar a la base que apoya los derechos del inmigrante”
¿Cuál es el reloj legislativo, apuestas? Las negociaciones presupuestales que incluyen la ayuda a Ucrania, Israel, Taiwán y el paquete fronterizo se intensificaron en las últimas horas, con la meta de llegar a un acuerdo la próxima semana antes del receso de fin de año.
Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino desde la capital, Washington, Jose López Zamorano.
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