Durante la navidad en las Filipinas se iluminan las ventanas y las calles con linternas en forma de estrella, que se llaman paroles. En California, hace diez años que grupos de migrantes filipinos en San Francisco construyen paroles juntos, y las organizaciones comunitarias concursan por ver quién hace el mejor parol que demuestre el tema del año. Este año se trata de la Iluminación para Todos, en el contexto del matrimonio gay y el tifón Haiyan. A través de los años, los jóvenes han ido colaborando con los mayores, y ambas generaciones comparten ideas para innovar la tradición. Zaidee Stavely reporta desde San Francisco. Este reportaje es parte de la serie Raíces: Historias sobre los artistas del pueblo.
En el Centro Comunitario Bayanihan de San Francisco, jóvenes, niños y adultos pegan barritas de bambú para formar esqueletos de estrellas, luego los cubren de papel de China y celofán de colores. A un ladito, el señor Don Gutiérrez prende las luces dentro de su propia estrella, de unos 7 pies de ancho.
Gutiérrez:
“You can hear the rhythm” (Se escucha el ritmo del parol).
Las luces se prenden en secuencia, iluminando diferentes partes de esta estrella enorme, que le tomó a Gutiérrez más de un mes construir. Encima del papel, Gutiérrez extendió fibra de abacá, una planta de la familia del plátano, nativa de las Filipinas. Gutiérrez dice que aprender a hacer paroles fue como un rito de iniciación en su país de origen.
Gutiérrez:
“Aprendí en la primaria. Es una tradición que cada año tienes que hacer un parol en la escuela”
(I learned from elementary grade in the Phillippines. This is a yearly tradition that you have to make a yearly parol in the school).
La tradición cobró aún más importancia para quienes emigraron a Estados Unidos, dice M.C. Canlas, el especialista cultural de la Fundación de Desarrollo Filipino Americano y el Centro Comunitario Bayanihan.
Canlas:
“En las Filipinas ponían a Santa Clos, los árboles de navidad y claro que también las linternas tradicionales. Pero cuando se mudaron a Estados Unidos, querían enseñar que eran filipinos, así que sólo querían poner linternas. Pero las tradicionales son hechas de bambú y papel de arroz y celofán, y no es fácil importar esos materiales”
(In the Philippines, they put Santa Claus, Christmas trees, and then of course they had traditional lanterns. But when they moved to the United States, they want to show they are Filipino, so they want to put lanterns. But the traditional ones are made of bamboo, or rice paper and cellophane, so it is not easy to import those materials).
En 2003, el Centro comenzó a dar clases para enseñar el arte de hacer paroles a los filipinos de San Francisco. El primer año, dice Canlas, los abuelos les enseñaban a los hijos y los nietos. En una sola noche, tuvieron a unas 100 personas haciendo las linternas juntos. Ahora, los jóvenes enseñan a los adultos.
Canlas:
“Por ejemplo, Gene, que ahora es nuestro maestro del parol, antes no sabía nada de paroles. Ahora es nuestro mayor recurso, porque desarrolla nuevas linternas y nuevos materiales”
(For example, Gene, our parol master now, he never knew parol before. Now he is our biggest asset in developing new lanterns and new materials).
El llamado “maestro del parol”, Eugene Apellido, ha elaborado nuevos diseños, como estrellas dentro de otras estrellas.
Apellido:
“Dejé de usar sólo papel, y empecé a hacer estrellas de dos capas, que es un poco raro. Adentro es de papel, y afuera hay una tela transparente. Y tiene un listón alrededor”
(I went from paper to a more double layered star. Inside it’s paper again, and the outside is a sheer material, and that’s ribbon around the edges).
A la par de los jóvenes, participan personas mayores. Un animado grupo de mujeres de la tercera edad corta y dobla papel de colores, mientras escucha a Los Beatles.
Sonido ambiental: Let it be…
Las señoras son del Centro de Equidad para los Veteranos, un grupo que trabaja con ancianos inmigrantes de todo el barrio del Sur de la Calle Market, de San Francisco. Mary Roque, de 20 años, trabaja en el Centro. Dice que el grupo está haciendo seis linternas para presentarlas en el festival del parol. Cada estrella representa un tema.
Roque:
“La equidad de los veteranos, la reforma del matrimonio, y la atención médica. Tambien vivienda, porque específicamente en el Sur de la Calle Market hay mucha gente siendo desplazada. Y queríamos tocar esos asuntos porque el tema de este año es ‘Iluminación para Todos’”
(Veterans’ Equity, marriage reform, and healthcare. We also chose housing, because specifically in the South of Market, there are a lot of people being displaced right now. And we wanted to look at these issues, because the theme this year is Enlightenment for All).
Iluminación, o concientización, para todos, es el tema que eligió el Centro Bayanihan cuando la Suprema Corte anunció que los matrimonios del mismo sexo pueden recibir los mismos beneficios que otras parejas casadas, explica M.C. Canlas.
Canlas:
“Yo dije, ya es hora de que nuestra comunidad se concientice. Y luego con lo que pasó en las Filipinas, no importa qué tan seguro pienses que estás, no hay seguridad, con esto del cambio climático. Así que pensamos que para esto también es importante la concientización”
(I said it’s about time that our community are getting enlightened. And then with what happened in the Phillippines, no matter how safe you think you are, there is no safe, with climate change, so we thought this is always good for enlightenment).
Sonido ambiental de violín eléctrico…
La noche del festival, un joven violinista, Corey “CryWolffs”, deleita a los parolistas con música clásica mezclada con ritmos contemporáneos. Es una banda sonora apropiada para el evento, en el que jóvenes y señores unen sus esfuerzos para representar a su comunidad.
Ante un público de cientos de personas, pasean unos veinte grupos distintos. Hay un parol cubierto de periódicos, con titulares sobre el tifón Haiyan. Hay paroles en forma de molinos de viento, para representar la energía alternativa. Un grupo de jóvenes inmigrantes de Daly City porta una estrella grande que representa a las Filipinas, y muchas chiquitas que representan todos los países a donde han migrado sus paisanos. Al pasar por el escenario, cantan por la reforma migratoria.
Sonido ambiental: Immigrants of this country. Reuniting families. Recognize our dignity. We deserve utmost respect. We don’t fully see it yet. Immigrant and worker rights. Join us now and take a fight.
Las mujeres del Centro de Equidad de los Veteranos cargan sus seis estrellas, cubiertas de papel amarillo, rojo y verde, para representar sus seis temas sociales. Y de repente sorprenden al público con un baile de cha cha chá.
Sonido ambiental: Cha cha chá…
No es de sorprenderse que ellas sean las que ganaron el primer lugar.
Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, Texto y Foto, Zaidee Stavely.