“Yo tenía que asegurarme que tenía bebidas con alcohol en mi refrigerador antes de tener comida”.

Cada año mueren más personas por causas relacionadas al consumo de alcohol que por sobredosis de fentanilo y otros opioides, según cifras oficiales. Sin embargo, no sólo poco se habla de esta otra crisis sino que su consumo se ha normalizado en la vida familiar y está muy presente durante los eventos deportivos. Eso preocupa a activistas y sobrevivientes de las adicciones, según nos reporta Miguel Guerrero desde San Francisco, California.

Agustin Caballero, tomando un descanso en la playa. Foto: Cortesía.

“Mi relación íntima con el alcohol comienza a un nivel que lo llevaría a un aspecto crónico desde la secundaria”

Cuando Agustín Caballero tenía 16 años tocaba en una banda de rock en San Francisco. Comenzó tomando para socializar y después siguió por su cuenta.

«Para calmar nervios, para calmar la tensión, la ansiedad que el compromiso trae«

Su adicción al alcohol le trajo serios problemas.

“Llegaba tarde al trabajo, llegaba tarde a los ensayos, a los conciertos y a los compromisos familiares”

Pero además le dio tentación por probar otras drogas.

“Ya sea mariguana, ya sea cocaína o algo más extremo”

Su situación se hizo insostenible. Fue su familia, compañeros de banda y de trabajo quienes le hicieron ver que necesitaba ayuda. Su pesadilla alcohólica le duró 20 años. Primero estuvo en un programa de rehabilitación médica, después pasó a las terapias del grupo internacional: Alcohólicos Anónimos. Agustín ya lleva más de 15 años sin tomar.

Aunque la mayoría de los alcohólicos son hombres, el número de mujeres sigue en aumento.

Flora, ya un poco mas relajada. Foto: Cortesía.

“Yo empecé tomando por una cuestión social… Porque en Estados Unidos se usa el alcohol para socializar”

Flora Campoy es originaria de la Ciudad de México. Empezó a tomar cuando llegó a San Francisco hace más de tres décadas. Primero tomaba sólo en reuniones o con amistades, pero después todos los días. 

“Yo tenía que asegurarme que tenía bebidas con alcohol en mi refrigerador antes de tener comida”

No le importaba tomar frente a su hija.

“De alcoholizarme enfrente de mi hija, creo que era una cuestión de respeto que yo no le tuve a ella”

Se le cayó el mundo encima cuando supo que su hija ya veinteañera consumía opioides. Se sintió culpable y suspendió la bebida.

«Decidí dejar de hacerlo, y lo dejé”

Aunque mucho se dice de las muertes por sobredosis de opioides poco se habla del mortal costo de consumir alcohol. Estefanía Caldera, de la organización Pueblo y Salud Inc. en San Fernando, California, coordina programas de prevención.

“Según el Centro de Control y Enfermedades en Estados Unidos se reportan anualmente unas 178 mil muertes a causa del exceso del uso del alcohol”

Estefania Caldera, de la organizacion Pueblo y Salud Inc. Foto: Miguel Guerrero.

Estefanía critica la promoción del consumo de la cerveza y el alcohol durante la transmisión de eventos deportivos, que ya se ha normalizado. 

“Cuando voy a ver mi partido favorito, me voy a echar una cervecita para poder disfrutar del evento y también lo voy a disfrutar con mis amistades y con mis familiares para pasarla bien”

Y es que esta industria invierte en grande para atraer nuevos consumidores de todas las edades, especialmente en mega eventos deportivos como el Super Bowl.

“El costo por un comercial de 30 segundos es de siete millones de dólares. Pero vemos que la audiencia para ese tipo de partido es de 132. 7 millones de personas que están viendo ese partido, ese juego, en una sola ocasión”

Esto no le parece bien a Flora, quien junto con su hija ya se recuperan de las adicciones. Considera que se debería de hacer algo para limitar o advertir de manera más agresiva sobre los daños que hacen a la familia y la sociedad la promoción desmedida del consumo.

“Se supone que un evento de deportes es algo sano, y ya no es sano cuando hay alcohol y cuando se están alcoholizando de más, donde hay pleitos, hay accidentes, hay muertes, y eso es permitido porque el alcohol es legal”

Y si a esto agregamos la crisis por el consumo de opioides y otras drogas, legales y no legales, tenemos un problema mayor.

Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, desde San Francisco, Miguel Guerrero.

Escuche la Edición Semanaria Completa: