Organizaciones civiles de perfil nacional, como United We Dream Action se movilizan «con valentía ante este despliegue de tipo militar lleno el odio dirigido a las comunidades inmigrantes en los vecindarios del país”, enseñando a las familias inmigrantes a protegerse a través de la acción comunitaria.

Grupos de derechos civiles exigen acceso a los registros sobre las descomunales multas civiles impuestas a las inmigrantes refugiadas en iglesias Santuario.

En una gran mayoría de estudios no se encontró una relación directa o causal entre inmigración y crímen, sino más bien una relación beneficiosa, en la cual las comunidades de inmigrantes, incluidos los indocumentados, brindan revitalización económica y cultural a los vecindarios a los que se unen o adoptan como su hogar.