Rubén Tapia
Noticiero Latino, Los Ángeles, CA.
A dos días de que termine formalmente el periodo legislativo de este año, grupos pro inmigrantes de California continúan la presión para que el liderazgo republicano de la Cámara baja someta a votación la reforma migratoria; ayer martes un grupo de sindicalistas y activistas comunitarios viajaron más de dos horas, desde Los Ángeles hasta Bakersfield para sumarse a la protesta de 11 días que sostienen frente a las oficinas de uno de los líderes republicanos más influyentes, el legislador Kevin McCarthy.
María Elena Durazo, líder de la Federación Laboral del Condado de Los Ángeles encabezó la delegación: “La mayoría de gente en este país dice: ‘Reforma Ya’; le decimos al congresista que no nos vamos a ir hasta que él ayude a pasar la reforma migratoria”.
Al mismo tiempo, en el condado de Orange otro grupo lleva dos días ayunando frente a las oficinas del legislador republicano, John Campbell. Su ayuno terminará el viernes, afirmó el sacerdote Ricardo Aguilar: “Cuando empezamos ni siquiera quisieron abrirnos la puerta para conversar con él, aunque el frío nos está calando los huesos; así que esperamos en Dios que él ponga su mano en la conciencia -si la tiene-, para apoyar una reforma migratoria”.
Estas acciones son parte del ayuno nacional que hace varias semanas grupos pro inmigrantes lanzaron frente al Congreso en Washington, y aunque las posibilidades cada día son menores, afirmaron que no pierden la fe.