José López Zamorano
Noticiero Latino, Washington, DC
En el marco de las celebraciones de Semana Santa el presidente Barack Obama se reúne este martes en la Casa Blanca con líderes religiosos para examinar los esfuerzos en favor de una reforma migratoria integral.
Entretanto las tres familias de inmigrantes de origen mexicano cumplieron seis días en huelga de hambre afuera de la Casa Blanca, y pasaron el relevo a otra familia hispana, cuyo padre de familia fue deportado.
«Tuve que dejar la huelga porque ya me sentía mal, me sentía bien dolorida, me sentía débil; a veces tenía mareos y tenía dolores de cabeza», dijo Cynthia Díaz, una de las huelguistas que participó en el ayuno para buscar la liberación de su madre, quien se encuentra detenida en un centro de reclusión de Inmigración, e inició allí su propia huelga de hambre.
La inmigrante, Ernestina Hernández se sumó al ayuno fuera de la Casa Blanca para lograr el reingreso de su esposo, quien fue deportado a México.