Rubén Tapia
Noticiero Latino, Los Ángeles, CA.
Con un acto frente al edificio federal en el centro de la ciudad de Los Ángeles y dos servicios religiosos, uno en Encino y otro en Pasadena, California, activistas sociales y grupos religiosos recordaron el pasado sábado el primer aniversario de la masacre en la escuela Sandy Hook del poblado de Newtown en Connecticut -que costó la vida de 30 niños y 6 adultos-, y demandaron además que el Congreso apruebe nuevas leyes para controlar la tenencia y el uso de armas de fuego.
Eventos similares se llevaron a cabo en varios estados del país como parte de la campaña “No más silencio”. Este anuncio es parte de la campaña después de la masacre de Newtown: “26 nuevos tiroteos han ocurrido en escuelas” y lanza la pregunta: “¿Es silencio lo que América necesita en este momento?”.
Según la organización, Mujeres Contra la violencia de las Armas, todos los días más de mil personas en el país son afectadas por la violencia con armas de fuego; esto sin contar los daños adicionales que causan a familiares, amigos y a la comunidad. 87 personas son asesinadas, se suicidan o se lastiman accidentalmente; 201 son baleadas, 732 son víctimas de asalto o robo en el cual se utilizaron armas de fuego.
