Marco Vinicio González
Noticiero Latino, Nueva York
Trabajadores que complementan sus ingresos con propinas, como meseros, repartidores o empleados que dependen de la buena voluntad de sus clientes, protestan en Harlem por un aumento salarial pues ganan 5 dólares la hora, y piden se les explique por qué no fueron incluidos en el aumento al salario mínimo aprobado por el estado de New York el año pasado.

En el estado el salario mínimo es de 8 dólares la hora, y en la ciudad es de 9.25. Por eso, estos trabajadores que ganan sólo 5 dólares por hora, o un salario denominado «sub-mínimo», consideran que ésta es una práctica ilegal. Como es sabido, el costo de la vida en Nueva York es uno de los más altos en el país y eventualmente en el mundo, pero en esta ciudad existen trabajadores que trabajan más de diez horas diarias y que muchas veces llegan a ganar hasta 20 dólares al día con todo y propinas, reporta la televisión pública.

Por eso los trabajadores que realizaron esta protesta exigen eliminar el salario “sub-mínimo”, y ganar lo mismo que todos los demás trabajadores en la ciudad.

Quienes se oponen a dichos aumento salarial argumentaron en una audiencia reciente que la realidad sobre cuánto ganan los trabajadores que reciben propina depende del establecimiento donde trabajan, aunque dicen también estar de acuerdo con buscar una solución a este problema.
En esa audiencia, donde testificaron trabajadores yrepresentantes de la industria hotelera y de restaurantes, estos últimos se opusieron al aumento salarial. Por ejemplo, la Hospitality Alliance de Nueva York argumenta que eliminar el salario sub-mínimo podría erosionar la creación de empleos y aumentar el costo de los servicios en restaurantes. Sin embargo aceptan “que no sería mala idea aumentar el sueldo a los que lo necesitan”.
Y os que más lo necesitan son por ejemplo los empleados de restaurantes donde la propina no es suficiente para que el empleado gane al menos 8 dólares la hora.

La última audiencia pública a nivel estatal será en diciembre, y en ella se podría arribar a una decisión en febrero de 2015.
Apoyados en un estudio publicado recientemente por la Sociedad de Servicios Comunitarios, los trabajadores y defensores del aumento salarial y de la desaparición del sub-mínimo asegura que los empleados más afectados son las mujeres.