Grupos de empleadores aplaudieron esta nueva concesión, que siguió a nutridas quejas del empresariado, y que fue anunciada por la Casa Blanca y del Departamento del Tesoro en su sitio web.

La medida no afecta otras provisiones centrales de la ley, como la creación de un mercado de seguros en los estados, conocido como el intercambio, y ha sorprendido a expertos en la materia, quienes sostienen que el número de nuevos asegurados que se esperaba para el año que entra se verá reducido drásticamente en el 2014. Pero la administración federal opina que no.

La decisión es vista ya como un importante revés a la pieza legislativa que distingue al Presidente Obama, y pospone el debate sobre los desasegurados más allá del periodo de elecciones de medio término.

Los republicanos por su parte reiteran su compromiso de desmantelar tan pronto como puedan lo que llaman el Obamacare, sostiene The New York Times.