Marco Vinicio González

Noticiero Latino, Nueva York

Con el fin mantener vigente la esperanza de que el Congreso vote por una reforma migratoria este verano, el presidente Barack Obama giró instrucciones al titular de Seguridad Nacional (DHS), Jeh Johnson, para que suspenda temporalmente la conclusión de una revisión a las políticas de deportaciones de inmigrantes indocumentados hasta fines del verano, de acuerdo con un alto funcionario de la Casa Blanca.

Afirma que grupos de inmigrantes exhortaron a Obama a dejar sin cambios el sistema de deportación de indocumentados, para no interferir en la discusión parlamentaria de la ley, que busca aprobar una amplia reforma migratoria este año.

“La prioridad del Presidente -dice un comunicado- consiste en promulgar una solución permanente para las personas que actualmente viven en las sombras y que sólo puede venir con la reforma migratoria”. Obama cree que todavía hay una oportunidad para que la legislación sea considerada en la Cámara baja este verano.

Por eso el Presidente le pidió al secretario de DHS retener el anuncio con los resultados del análisis hecho sobre las políticas de deportación, mientras se sigue perfeccionándose dicho examen, lo que da a la Casa el espacio necesario para arreglar el sistema roto de inmigración, y negar a los republicanos alguna nueva excusa para la inacción, argumenta la Casa Blanca.

El secretario Johnson ha dicho que va a buscar un nuevo comienzo en el programa de Comunidades Seguras, y se especula que va a actualizar las prioridades de control que la agencia creada en 2010. Tomará tiempo para conseguir este derecho, y el Secretario tomará el tiempo que necesita para hacerlo bien, sostiene la fuente.