De La Jornada
Si alguien ingenuamente creía que este era el año de Carranza, porque el de Hidalgo no alcanza, se equivoca. El saqueo más cínico y pernicioso de la nación se consuma a la vista de todos, y esto puede conducir al abismo de la clase política, a una pérdida del país irreversible o a un caos, dice John M. Ackerman en este artículo de opinión: