Marco Vinicio González
Noticiero Latino, Nueva York
Una vez más la Ley del Sueño de Nueva York, que permitiría a los estudiantes indocumentados acceder a la ayuda financiera estatal, fue derrotada ayer en el Senado, controlado por una coalición de republicanos y demócratas disidentes. La votación se quedó corta por dos votos (29 a 30), pues necesitaba 32 votos para pasar. Cuando la votación se hizo inminente ayer lunes, los propulsores de la medida se movilizaron presurosos para aplazar dicha votación, pues querían estar seguros de contar con todos los votos que garantizara el triunfo de la medida en esa cámara, de donde iría al escritorio del gobernador para que la promulgara. De acuerdo con Francisco Moya, asambleísta demócrata por Queens, les dieron un “cobarde madruguete”.
La Ley Dream de Nueva York había sido aprobada el mes pasado por la Asamblea Estatal, que incluso la había considerado en el presupuesto para el estado. La medida, introducida a la Asamblea estatal por primera vez en 2010, había sido considerada como una pieza legislativa controvertida, porque incluía originalmente un permiso de trabajo y licencia de conducir, componentes que fueron eliminados para evitar confrontaciones con los republicanos opositores cuando se discutiera en el Senado. Contaba por primera vez en esta ocasión con el visto bueno del gobernador, Adrew Cuomo, del alcalde, Bill de Blasio, y del Cardenal Timothy Dolan, una de las máximas autoridades católicas en el país.
Quienes se opusieron a la Ley del Sueño de Nueva York argumentaron, como siempre lo han hecho, que esta ley no era justa con los estudiantes que están en Nueva York legalmente, pues les quitan los recursos financieros para su educación superior.