De La Redacción

La Agencia Central de Inteligencia, CIA, ha mantenido por décadas un depósito secreto de almacenamiento de armas (Almacén del Medio Oeste, según consta en comunicaciones internas de la CIA), desde donde ha enviado de manera ilegal estas armas para mantener operaciones secretas y clandestinas a partir de principios de los años 60, cuando por ejemplo llevó a cabo la invasión a Bahía de Cochinos (en Cuba, que estuvo a punto de desatar una guerra mundial), dice un despacho de Notimex.

Desde ese sitio se despacharon armas destinadas además de a las fuerzas anticastristas en Cuba durante los años de la administración Kennedy, a los combatientes anticomunistas en la guerra civil de Angola y a los opositores de los sandinistas en Nicaragua, conocidos como La Contra, envueltos en escándalos de tráfico de armas y de drogas para burlar al Congreso estadunidense.

El almacén de armamento secreto, que ha servido a Estados Unidos para apoyar dichas invasiones y operaciones clandestinas de impulso a la contrainsurgencia en otros países, se halla en al campo militar Stanley, en San Antonio, Texas. También desde ahí se enviaron pertrechos bélicos -durante los 80- a los grupos islamistas que combatían a los soviéticos en Afganistán, sostiene The New York Times.

El pasado 3 de abril tras una audiencia cerrada en el Comité de Inteligencia del Senado estadunidense, la titular de este órgano, la demócrata, Dianne Feinstein, advirtió sobre los envíos clandestinos de la CIA a las fuerzas opositoras al gobierno en Angola, Cuba, Nicaragua y a grupos islamitas, entre otros países intervenidos de esta manera, reporta Prensa Asociada.