José López Zamorano
Noticiero Latino, Washington, DC
Con un llamado al presidente Barack Obama para poner fin a la deportación de casi dos millones de personas, miembros de organizaciones religiosas protestaron frente a la Casa Blanca y 32 fueron arrestados por la policía.
“Queremos una reforma migratoria para 11 millones de personas que estamos aquí indocumentados. El tiempo es ya”, señaló la inmigrante Ana Machado. Su mensaje a presidente, Barack Obama: “El nos prometió, queremos que nos cumpla”.
Se trata del más reciente acto de desobediencia civil, como parte de la nueva campaña de activistas para presionar tanto a la Casa Blanca como al Congreso de la aprobación urgente de una reforma migratoria.
Los manifestantes de varios grupos religiosos, así como de una agrupación de jornaleros, pidieron que la Casa Blanca suspenda las deportaciones en tanto se completa la aprobación de un proyecto de ley.
La administración Obama continúa deportando en promedio mil 100 personas indocumentadas al día.