Javier Aparisi
Noticiero Latino, Miami, Florida
Mike Fernández, un acaudalado empresario de origen cubano tiene previsto abrir las puertas de su casa este lunes, en el coqueto barrio de Coral Gables, como anfitrión de un evento de recaudación de fondos para la Asociación Nacional de Gobernadores Republicanos.
Sin embargo, hay un problema: Fernández renunció el pasado jueves al puesto de jefe de recaudaciones de la campaña por la reelección del gobernador de La Florida, Rick Scott, tras señalar que necesitaba pasar más tiempo con su familia.
El diario The Miami Herald informó la semana pasada que fuentes cercanas al empresario, de 61 años de edad, revelaron que el motivo de la renuncia podría ser otro: el malestar de Fernández con la conducción de la campaña de Scott, y específicamente su enojo ante un incidente en el que asesores del gobernador imitaron acentos mexicanos mientras se dirigían hacia un restaurante mexicano.
Rick Scott se ha postulado a la reelección en noviembre y últimamente ha hecho grandes esfuerzos por conquistar el voto hispano. La Cámara baja de la legislatura estatal bajo control republicano aprobó la semana pasada matrículas universitarias de residente para estudiantes indocumentados, una medida que todavía está pendiente en el Senado.