Marco Vinicio González
La Proposición 308 pasó en Arizona, para permitir que los estudiantes Soñadores o Dreamers puedan pagar la misma matrícula universitaria estatal que los estudiantes ciudadanos y residentes legales de ese estado fronterizo.
El triunfo de esta importante medida se debió a la infatigable y creativa lucha de los Dreamers, en la búsqueda de un estatus legal permanente con la que están de acuerdo unos 8 de cada 10 ciudadanos estadunidenses; y a su gran capacidad de tejer alianzas con grupos diversos de la sociedad, como American Business Immigration Coalition Action, ABIC, en representación de más de dos docenas de organizaciones defensoras de los derechos educativos, laborales, políticos, de negocios, migratorios, etcétera.
“Esta victoria no podría haber ocurrido sin los valientes soñadores como Hazel, que se presentaron y contaron sus historias para conmover los corazones y las mentes de los votantes de Arizona dice un comunicado de Hazel Villatoro y Bob Worsley.
Agregan que este triunfo “no podría haber ocurrido sin los socios de la coalición en el terreno, que tocaron incansablemente millones de puertas no sólo en este ciclo -electoral- sino en todos los ciclos para transformar la política de Arizona”.
Con esta victoria, hora Arizona se une a otros 22 estados que permiten a los soñadores, la oportunidad de asistir a la universidad pagando la matrícula estatal.
“Vine a Arizona cuando tenía 7 años y continué estudiando hasta la preparatoria donde hice a mejor amiga, que todavía conservo, pero ella no sabía que yo era indocumentada hasta hace dos o tres años… no quería herir mis sentimientos cuando ella supiera que no podía ir a la universidad”, dijo Hazel.
“Pero finalmente me armé de coraje y confesé que era indocumentada y que no podía ir a la universidad porque no podía pagarla. Y eso se siente muy liberador, porque ser indocumentado o incluso dreamer puede dar mucha vergüenza…”.
A pesar de todas las adversidades, pues lucharon contra más de 38 millones de dólares en anuncios de ataques antinmigrantes que se publicaron las 24 horas, los 7 días de la semana, personas como Hazel y de todas las creencias políticas, religiosas y orígenes nacionales, que “se unieron, recaudaron dinero, tocaron puertas, compartieron sus historias y lucharon por un cambio que es bueno para la economía, bueno para los jóvenes y sus familias, y bueno para todos los arizonenses.
Además, ABIC lideró una ambiciosa campaña que recaudó y gastó casi 6 millones de dólares en un esfuerzo de medios sin precedente, con anuncios de transmisión que llegaron al 93 por ciento de los hogares en el estado; anuncios de video digital programáticos que generaron 6.5 millones de impresiones y anuncios en redes sociales que alcanzaron 6.8 millones de impresiones de votantes jóvenes e indecisos.
«El voto bipartidista en Arizona, que permitió e triunfo de la Prop. 308 muestra el camino a seguir luchando por el futuro de los Soñadores y de grupos como los trabajadores agrícolas esenciales»•