De la redacción
En lo que puede interpretarse como una victoria para los demócratas, pero sobre todo para el pueblo estadunidense que se ha volcado a las urnas en una muestra de sumo interés por participar en el proceso cívico que ocupa a la nación, el lunes la Suprema Corte de Justicia permitió tiempo adicional para que durante este tiempo de pandemia se cuenten las boletas por correo del voto ausente que lleguen después del día de las elecciones generales, en un estado campo de batalla como lo es Pensilvana.
La decisión de la Suprema Corte, de extender el tiempo para el conteo de los votos ausentes que lleguen por correo a la junta electoral consistió en no intervenir en el fallo de una corte inferior de Pensilvania que había permitido a los funcionarios electorales contar algunas boletas enviadas por correo, que serían recibidas hasta tres días después del día de las elecciones.
Durante la discusión de los magistrados al respecto, tras llegar a un empate pues las partes debían reunir cinco votos para imponer su dictamen, la Suprema decidió entonces no intervenir en el fallo de la corte de Pensilvania, un estado campo de batalla, como hemos señalado ya en este mismo espacio informativo..
Por parte de los magistrados que se opusieron a la extensión del contgeo estuvieron Clarence Thomas, Samuel A. Alito Jr., Neil M. Gorsuch y Brett M. Kavanaugh. Y alineándose con los demócratas estuvo el presidente de la Corte Suprema, John G. Roberts Jr., y los otros tres miembros del ala liberal, Stephen G. Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan, quienes defendieron la extensión del tiempo para el conteo de lso referidos votos.
Como suele suceder en este tipo de decisiones de último momento en la Suprema, y más aún por tratarse de un tema tan sensible a 14 días de las elecciones presidenciales más importantes de los últimos tiempos, los magistrados no dieron razones acerca de su fallo. Pero dicha decisión da una idea de lo habría podido pasar en una Corte Suprema que contara con el voto de la nominada de Trump, la jueza Amy Coney Barrett, quien se espera será confirmada la próxima semana, y quien habría desempeñado un papel decisivo en esta disputa.
La decisión es pertinente si se considera que los votantes demócratas han estado solicitando votos ausentes en un número mucho mayor que los republicanos. De acuerdo con datos de la Secretaría de Estado de Pensilvania, hasta este el viernes los demócratas en Pensilvania habían solicitado un millón 755 mil 940 boletas mientras que los republicanos sólo 672 mil 381.
«Los votantes de Pensilvania merecen claridad y confianza en nuestro proceso electoral, y el fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos esta noche deja en claro que nuestra ley se mantendrá a pesar de los repetidos ataques», dijo Josh Shapiro, el Fiscal General de Pensilvana al New York Times. «Con casi un millón de votos ya emitidos en Pensilvania», agregó, «apoyamos la decisión de la Corte de no inmiscuirse en nuestro sistema, que ya funciona».
Por todo esto, se espera que Pensilvania sea uno de los últimos estados en tener resultados finales de la votación después del 3 de noviembre, ya que una ley estatal impide comenzar a procesar las boletas hasta que llegue el día de las elecciones, “y los republicanos de la legislatura estatal han indicado que no ofrecerán ningún apoyo”.
Pensilvania es un estado clave pero con numerosas demandas relacionadas con la votación, dice la fuente, incluida una sobre si los funcionarios electorales tendrán que realizar la comparación de firmas en las boletas de votantes ausentes■