De la Redacción
Tan pronto cómo esta semana se espera que el presidente Donald Trump anuncie una nueva ley ejecutiva sobre inmigrantes y refugiados. Así lo anunció él mismo durante un mitin con sus seguidores en un hangar del Aeropuerto Internacional Orlando Melbourne este fin de semana “Nosotros no nos rendimos, vamos a hacer algo esta semana con lo que creo que van a estar impresionados. Tenemos que mantener seguro nuestro país”.
Trump emitió un decreto el pasado 27 enero que cerraba temporalmente las puertas a los refugiados e inmigrantes de siete países de mayorías musulmanas – Iraq, Syria, Iran, Libya, Somalia, Sudan and Yemen-, y suspendía la acogida de refugiados durante 120 días para examinar los mecanismos de aceptación.
La nueva orden de acuerdo a diversas fuentes anónimas citadas por CNN, El New York Times y el Washington Post estaría en su etapa final de revisión, y aunque se sigue enfocando en los siete países originales, no abarcaría a los inmigrantes que poseen tarjetas de residencia permanente (Green cards).
De acuerdo con el Secretario de Seguridad Nacional John F. Kelly la nueva orden también intentaría evitar el caos creado por la primera orden que inmediatamente prohibía la entrada al país de cualquier persona proveniente de los siete países mencionados. Kelly dijo en la Conferencia sobre Seguridad en Múnich este lunes que en esta ocasión se evitará detener a viajeros en tránsito, dijo querer “asegurar que nadie quede atrapado en el sistema al trasladarse de otros países a nuestros aeropuertos”, “Si están en un avión con destino a nuestro país, se les permitirá la entrada”, y agregó “ Esto es, nuevamente, sólo una pausa mientras revisamos éstos siete países- en cuanto a sus procesos de revisión, y que tan confiables son- y déjenme decirles que no son tan confiables.”
Sin embargo, entre las preocupaciones de algunos están los reducidos números de refugiados que serán admitidos bajo el gobierno de Trump. Bajo la orden ejecutiva del 27 de enero se establecía un tope de 50 000 refugiados por año – la mitad de los que se aceptaban bajo el gobierno de Obama-, y según un reporte de Fox News, dicho tope no fue afectado por las cortes en su bloqueo de la primera orden. Las cortes, dice el reporte, bloquearon la orden en base a su rechazo de la autoridad presidencial y a sus motivos para con la ley, así como en base a la habilidad de dicho decreto de sobrevivir retos legales, pero dejó intacto el número de refugiados que podrán entrar al país cada año.
Otro punto polémico por resolverse es el caso de las visas inmigrantes especiales que se otorgan a aquellos Iraquís y Afganos que han colaborado con las fuerzas armadas de los Estados Unidos durante las guerras, como traductores, entre otras actividades. El representante Republicano por Illinois, Adam Kinzinger, quien sirvió en Irak y Afganistán, expresó su preocupación durante un programa de CNN de que la nueva orden les prohíba la entrada a éstos posibles inmigrantes » Espero que no estén en la nueva orden ejecutiva, pero suena como que pueden estar”, dijo Kinzinger.