De la redacción
Trabajadores agrícolas de la trilla de trigo y de lecherías en Nueva York, cuya mayoría son inmigrantes y muchos de ellos indocumentados, llevaron hata la Suprema Corte de Justicia una demanda interpuesta por la Unión de Libertades Civiles (NYCLU) a nombre del empleado Crispín Hernández y otras dos organizaciones defensoras (Center of Central New York, y The Worker Justice Center of New York), contra una vieja ley que data de hace 80 años y que afecta también a otros trabajadores como las niñeras.
Dicha ley impide a los empleados su derecho a organizarse y a ejercer acciones legales de manera colectiva contra sus empleadores, lo que ha derivado en “una explotación profunda”, dicen sus defensores según The New York Times.
Los abogados de NYCLU argumentan ante la Suprema Corte del Estado, en Albany, la capita, que la referida ley “viola la Constitución de Nueva York, que permite organizarse a todos los trabajadores».
Por eso los demandantes sometieron dicha demanda ante la Oficina de Asuntos Agrícolas (The New York Farm Bureau), pero un grupo de cabildeo para la industria agrícola argumento que «el trabajo agrícola es diferente de otras industrias debido a su carácter estacional y los animales requieren cuidado constante». Eso hace insostenible la sindicalización y las huelgas, dice la fuente.
El pleito lleva tiempo, pero cuando se presentó la demanda en mayo del año pasado el gobernador de Nueva York, Andrew M. Cuomo dijo que el estado se opondría a combatir dicha demanda de los trabajadores, acordando con ellos que “sus derechos están siendo violados inconstitucionalmente”. Sin embargo, meses más tarde la Oficina de Asuntos Agrícolas recibió permiso de la corte para intervenir en el estado y defender la ley de marras.
Cuomo dijo entonces que «es lógico el derecho a organizarse sin represalias. Un derecho que debiera ser otorgado a prácticamente todos los trabajadores en el Estado de Nueva York», sólo que esta ley excluye a los trabajadores agrícol,as «en una aparente clara violación de nuestros principios constitucionales». Nueva York, agregó Cuomo, «luchará contra esta injusticia y continuará asegurando los derechos e iguales protecciones de todos los trabajadores».
En la demanda de los trabajadores, sus defensores presentaron el informe titulado: «Milked», que documenta alegados abusos laborales como robo de salarios y peligrosas condiciones de trabajo, donde estos trabajadores inmigrantes de la industria de los lácteos “han sido pisoteados y corrompidos”. Pero por su situación como indocumentados temen represalias si se pronuncian, según el informe.
En el enlace de abajo podrá conocer (en inglés) el desenlace de esta interesante historia de lucha laboral de los trabajadores de lechería y del campo en Nueva York, muchos de ellos indocumentados, que viven en casas provistas por sus empleadores y que tienen que comprarle a sus patrones los principales utensilios del trabajo diario en las lecherías, dijo Crispín Hernández a la fuente■
New York Farmworkers to Argue in State Supreme Court for Right to Organize