La familia de Frankie junto a personas en la comunidad, se unen en círculo para honrar la memoria de Frankie.
Hace dos años, un joven mexicano que creció en Arizona y obtuvo su permiso de trabajo mediante el programa DACA se quitó la vida luego de ser deportado. El suicidio del joven, de nombre Frankie conmocionó a la comunidad de activistas a la que pertenecía. Hoy su hermana se vuelca al activismo porque dice que no quiere que la tragedia se repita. Valeria Fernández viajó a Flagstaff, en el norte de Arizona, y nos cuenta cómo el legado de activismo del joven Frankie sigue inspirando cambios políticos en este conservador estado.
Se escucha rezo: Padre nuestro…
En el gimnasio de la escuela primaria Killips, donde estudio y jugó de niño Frankie Madrid, familiares y amigos se reúnen para recordar el segundo año de su muerte.
Su hermana, Dulce Bojórquez, conteniendo lágrimas y rabia destaca el impacto que el activismo de Frankie dejó en su familia.
“I think I should be at home with my family remembering my brother, yet here I’m in front of all of you to tell you that we need change.”
Dulce Bojórquez habla sobre su hermano a dos años de su muerte el 2 de octubre de 2017.
Dulce dice que no debería tener que estar ahí para mostrar su dolor; debería de estar recordándolo en su casa, con su familia, pero señala que la necesidad de un cambio es urgente.
Frankie Madrid llegó en brazos de un familiar de Sonora, México a Estados Unidos cuando era un bebé. Creció en Flagstaff, Arizona, y desde su adolescencia trabajó cuidando ancianos.
Fue de los primeros en luchar por los Soñadores y los derechos de la comunidad LGBTQ en esa ciudad turística de 70 mil habitantes.
“There’s many of us who have done everything that we possibly can to live the right life and to just continue prospering and contributing to our community and immigration doesn’t allow us to do that.”
(Hay muchos de nosotros que hemos hecho todo lo posible para vivir la vida correctamente y simplemente continuar prosperando y contribuyendo a nuestra comunidad, e Inmigración no nos permite hacer eso), dijo Frankie en su oportunidad.
Su activismo le ganó el respeto de muchos políticos locales, como el de Eva Putzova, una inmigrante de Eslovakia a quien Frankie apoyó con éxito para que ocupara un puesto en el Concejo de la Ciudad.
Frankie Madrid. Unos días después de haber sido deportado a México sube esta foto a las redes sociales. Foto: Cortesía Familia Madrid.
“He was the kind of person who showed up for everybody. He was there helping to launch Ann Kirkpatrick campaign, he was there for people when they were rallying against SB 1070, was there at every single rally I can remember.”
(Él era la clase de persona que apoyaba a todos los demás. Estuvo ayudando en el lanzamiento de la campaña de Ann Kirkpatrick, estuvo ahí cuando la gente marchó en contra la ley SB 1070, estuvo ahí en todas las manifestaciones que puedo recordar), señaló Putzova.
Durante su adolescencia Frankie sufrió de depresión y ansiedad, y el tratamiento que obtuvo fue muy limitado. Cuando una abogada de inmigración lo defraudó y perdió su permiso de trabajo (conseguido a través del Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, DACA), Frankie cayó en un pozo depresivo y se volcó a las drogas. Fue arrestado por posesión de heroína para la venta. Estuvo preso más de un año y medio y al cumplir su sentencia fue deportado de inmediato, en agosto de 2017.
Para recaudar fondos que lo ayudaran a instalarse en México, la concejala Putzova abrió una página en Internet. No le importaron las fuertes críticas que recibió por ayudar a un inmigrante con antecedentes penales.
“Everybody deserves to live with dignity and Frankie was forced to live in the shadows of our society.” (Todos merecemos vivir con dignidad y Frankie fue obligado a vivir en las sombras de nuestra sociedad).
Eva Putzova, candidata al Congreso por el Distrito 1 de Arizona, junto a María Madrid, la madre de Frankie.
Desesperado porque creyó imposible que pudiera reingresar para cuidar de su madre enferma y su hija, entonces de 7 años, y sin ayuda médica mental dos meses después Frankie se quitó la vida. Su trágico fin impactó tanto a Dulce, que decidió continuar el activismo de su hermano:
“Estoy tratando de seguir en su lucha y tratar de hacer que algo cambie. Esta historia se repite, que esta vez el Frankie pueda regresar a su casa, no mi Frankie sino otro muchacho o muchacha que a lo mejor esté pasando por lo mismo”
Por su parte, la concejal Eva Putzova cuestiona el actual sistema que niega servicios médicos y de salud mental a los indocumentados, yque le negó una segunda oportunidad a Frankie después de que cumpliera su sentencia.
“Frankie got help with his drug addiction in jail…something that was no available to him before. Frankie’s story is not just a story of immigration, it’s a story of mental health care, and it’s a story of a justice system”.
(Frankie recibió ayuda con su adicción a las drogas cuando estaba en la cárcel, algo a lo que no tuvo acceso antes. Su historia no sólo es sobre la inmigración, sino que es una historia sobre los cuidados de salud mental y una historia sobre nuestro sistema de justicia criminal), afirmó Putzova.
Un mural cerca de la escuela Killips que Frankie Madrid ayudó a pintar en su infancia. El arte lo muestra a él saludando a lo lejos.
Putzova convirtió su crítica en una propuesta que tituló: Frankie’s Law, o la Ley de Frankie, que es la plataforma de su campaña por un puesto en el Congreso federal por el Distrito 1 de Arizona el próximo año. El anuncio lo hizo durante el segundo aniversario de la muerte de Frankie:
“When we’re deporting people from this country we’re not just harming those individuals and creating hardship for them, we’re also creating trauma for families for children, and entire communities that are left behind.”
(Cuando deportamos a personas de este país, no sólo estamos dañando a esos individuos o creando una situación precaria para ellos; estamos generando trauma para las familias, para los niños y para la comunidad que se queda).
Zaira Livier habla sobre cómo conocer a la familia de Frankie la motivó a continuar su activismo por la Proposición 205.
Su plataforma incluye abolir a ICE (Inmigración y Control de Aduanas), legalizar a la población indocumentada y crear un comité integrado por comunidades indígenas que supervise las políticas de migración en el país. Pero el activismo de Frankie también hizo eco a más de 250 millas de distancia. En Tucson, por ejemplo, donde la activista Zaira Livier tenía su propia batalla.
Zaira Livier es directora de People’s Defense Initiative:
“Conocí la historia de Frankie a tres semanas de que murió mi hermano. Muchos de nuestra familia se van y la única forma que pueden regresar son fallecidos”
Said Guillermo, el hermano de Zaira había sido deportado hacia 5 años y fue ejecutado en Querétaro, México, ciudad donde nació. Zaira se convirtió entonces en activista para lograr el regreso de su hermano, pero cuando murió se cuestionaba para qué seguir adelante.
Se escucha en el ambiente…
I thought if frankie’s family can fight, so can we… (Pensé que si la familia de Frankie podía pelear, nosotros también)….
Dulce Bojórquez abraza a Zaira Livier, durante el evento para recordar a su hermano Frankie Madrid.
En el activismo de la familia de Frankie Zaira encontró la motivación que le faltaba y promovió una ordenanza para que la ciudad de Tucson se convierta en la primera Ciudad Santuario de Arizona.
“Esta campaña es con la gente y es para protegernos a nosotros mismos; y para… asegurar que todo el pueblo tenga dignidad, seguro (médico) y justicia”, dijo Zaira.
La propuesta, conocida como la 205 llegará a los votantes el próximo 5 de noviembre. Según Zaira, si se aprueba sería una forma de rechazar la ley SB 1070, que obliga a la policía a verificar el estatus migratorio de una persona. Esta propuesta hace todo lo contrario.
Sonido de la conmemoración…
A dos años de la partida física de Frankie Madrid, lo recuerdan con este homenaje. Aunque su mamá María sigue sintiendo un profundo dolor por su partida, la consuela el saber que el legado de su hijo no será olvidado:
“Lo que él dejó, que continúe; y qué bonito que lo recordaron así para que ayude a otra gente”
Para la Edición Semanaria del Noticiero Latino, desde Flagstaff, Arizona, Foto y Texto de Valeria Fernández.
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