Sociedad civil de Texas responde a ayudar a los damnificados por heladas y apagones

Las extremosas heladas seguidas de grandes apagones y cortes al suministro de agua potable en Texas han provocado una gran crisis humanitaria. Ante la ausencia de las autoridades de emergencia, miles de residentes y organizadores comunitarios sumaron fuerzas para llevar ayuda de urgencia a los damnificados. A continuación, algunos de los organizadores de la ayuda hablan de su trabajo, comenzando con Yadira González (YG), organizadora de La Unión del Pueblo Entero, mejor conocida como LUPE, en El Alamo; Tomas Aguilar (TA), de Living Hope en Houston, organización de migrantes discapacitados; y Claudia Muñoz (CM), de Grassroot Leadership, en Austin.



YG: Yo estuve dos días sin servicio eléctrico. Era tanto el fría, que decidimos en ratos estar en mi propio carro con el calentó prendido para poder soportar ye en ratos cuando me tocaba hace de comer, pues entonces usar la estufa. Organizamos una junta virtual lo más pronto que pudimos y tuvimos que pedir donaciones. Tuve que hacer una larga fila para el gas porque estaba transportando para llegarles a las familias la ayuda. Preferían aguantar el frío a irse a un albergue, ahorita mucha gente tiene miedo a salir por ese virus, a contagiarse. Las mismas personas, y no tanto por los representantes o comisionados o alcaldes sino la misma comunidad… Tiendas que tenían la oportunidad de hacer platos de comida y estar entregando. Personas con algunos puestos de tacos, hamburguesas pequeños. Ellos mismos son los quisieron dar comida caliente para personas que no tenían y entonces nos unimos en ese modo y hubo como más unión, más humanidad.

TA: En las tiendas, huevo, leche, pan, se acaba bien rápido. Y póngase a pensar, si está en el frío, depende de un servicio de transporte, cómo va a salir a las tiendas a ponerse en fila ahí con todos los demás. Y acuérdense, todavía está el covid, y se acaba todo bien rápido. So, para una persona con discapacidad, u desastre les pega mucho más pesado. Reparaciones, tuberías, paredes, baños, pisos…, trabajas por día, pierdes una semana y eso es un golpe bien fuerte. Estamos ayudando a nuestra membresía y a otros que aplique por las ayudas, verdad. Pero ciertas ayudas no están disponibles para una persona inmigrante. Así que tenemos que buscar más fuerte con las iglesias, con las caridades. Y no nomás es cuestión de decir, aplica con la Cruz Roja. No. también es cuestión de ayudar a aplicar, porque esas aplicaciones están difíciles, son bien largas, o la persona no tiene computadora, y a la misma vez todo el mundo está pidiendo ayuda. Y estamos recaudando agua y otras cosas, para repartir, y también donaciones para dar ayuda directamente a las personas.

CM: Somos abandonados, nuestros gobiernos locales no salieron a empezar a repartir comida y agua hasta el jueves. Fueron cuatro días después de que habíamos perdido electricidad, que habíamos perdido el agua. Hay muchas personas que por ejemplo nos dijeron que trabajaban en construcción…, muchos inmigrantes que llegaron apenas a este país y que no tienen carros, por ejemplo, verdad. Comparten un carro con dos compañeros de trabajo. Entonces había personas que aunque el jueves hubo sitios de la ciudad donde podía uno ir a recoger agua pero las personas no podían salir. Carros que podían manejar en la nieve son las personas que andaban repartiendo. Moviendo personas de edad avanzada a otros lugares que tenían todavía luz y agua, etcétera. Fue demasiado impactante, verdad, para mí, hablar con personas que sinceramente no tenían nada, absolutamente nada que comer, una gota de agua que tomar. Había personas ancianas de edad avanzada, y niños chiquitos, Realmente están muy preocupadas, porque ahora ya se va a cavar el mes, es tiempo de pagar la renta, los recibos, es muy difícil. Entonces lo que vamos ahorita a tratar de empujar a nivel local es la asistencia de dinero en efectivo a las personas para que se les ayude a pagar la renta. Obviamente estamos pidiendo que se cancelen también los recibos del agua y de la luz. Y lo que diría a otras personas en otras partes del país, es que esto debe servir como una lección para todo el mundo. Lo que nos salvó acá a muchas personas fue la ayuda mutua, ayuda comunitaria; no fueron los gobiernos ni nada. Entonces, el hecho de que hemos pasado de una crisis a otra con la pandemia y ahora con esto, que sea como una lección para todos. Para que empecemos a prepararnos un poco más y a conocernos, porque hay veces que el que te va a salvar es tu vecino de al lado■

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