Mapa de las olas de calor en Estados Unidos. Foto: https://nihhis.cpo.noaa.gov.

Una colaboración interinstitucional federal entre la Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA), la Oficina de Cambio Climático y Equidad en Salud (OCCHE) y el Sistema Nacional Integrado de Información sobre la Salud del Calor (NIHHIS), asociación desarrollada por el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades, CDC, lanzan iniciativa par señalar dónde estarán los mayores riesgos para la salud debido al calor durante esta temporada de 2022 en Estados Unidos, y también brinda herramientas o un conjunto de recursos para protegerse de estos peligros y desarrollar resiliencia.

Marco Vinicio González

Una iniciativa del gobierno federal dice estar disponible para ayudar a poblaciones de condados que resulten vulnerables a las olas de calor que se avecinan, y que serán extremadamente calurosas. También identifica poblaciones vulnerables en esos condados que podrían verse afectadas por la exposición al calor.

Para esto, el gobierno federal proporciona un conjunto de recursos, adicionales a los del Departamento de Salud y Recursos Humanos de EE UU, HHS, dirigidos al público; a poblaciones específicas como las de profesionales de la salud pública y funcionarios del ramo, para reducir los riesgos a la salud causados ​​por el calor, dice el DHH.

Se trata de “desarrollar resiliencia a los impactos del cambio climático”, afirma el HHS. Y como parte de esta y futuras ediciones, “la serie agregará una visión de salud desde las perspectivas meteorológicas y climáticas estacionales de la NOAA, para informar a los profesionales de la salud y al público sobre los riesgos para la salud relacionados con el tiempo y el clima en meses venideros, a fin de avanzar y proporcionar recursos para prepararse”.

El titular de esta dependencia federal, HHS, Xavier Becerra dijo que «las consecuencias de la exposición al calor extremo, pueden provocar enfermedades y la muerte y hacer que sea mucho más difícil un día de trabajo al aire libre”, en alusión a todos esos trabajadores mayormente inmigrantes que trabajan en las labores agrícolas, en la construcción o en instalación de techos y carreteras, por ejemplo, sin importar el clima.

Con base en las perspectivas climáticas mensuales y estacionales de la NOAA, esta primera iniciativa presenta estimaciones de los condados de Estados Unidos, y para eso HHS lanza la herramienta Outlook, que actualizará datos constantemente y mejorará regularmente la información a medida que se vayan recopilando más hallazgos científicos sobre el tema y comentarios públicos y profesionales.

“Las ediciones futuras abordarán otras amenazas también, relacionadas con el clima para la salud de las personas que viven en Estados Unidos, con un enfoque en los más vulnerables”. Léase: las comunidades más pobres y de color. “Nuestras comunidades en todo el país pronto enfrentarán olas de calor que serán una carga adicional para nuestros sistemas de salud”,dijo por su parte la subsecretaria de Salud, almirante Rachel Levine.

Y señaló que “Esta información salvará vidas cuando la utilicen los funcionarios de salud pública, los empleadores con trabajadores al aire libre, las escuelas y los departamentos de salud locales, así como las personas a las que sirven. Tener información por adelantado puede reducir las enfermedades y las muertes por exposición al calor extremo”¶