De la redacción
Luego de visitar las precarias instalaciones donde mantienen capturados a niños y niñas mayormente de 4 a 9 años de edad, sin saber estos dónde están sus padres y sufriendo fuertemente su ausencia, representantes de las principales asociaciones médicas de Estados Unidos, especializadas en pediatría, psiquiatría y otros campos de la salud mental han determinado públicamente que se trata de abuso sicológico contra los menores. Y evalúan ante los mayores medios de comunicación la situación de los niños y niñas apresados, como un estado de extrema tensión o estrés, que está cambiando la arquitectura de las funciones cognitivas en su cerebro a temprana edad; con consecuencias posiblemente irreversibles que afectarán su habilidad de hablar, aprender, comportarse socialmente y también sus relaciones afectivas en el futuro.
La publicación de un audio grabado a escondidas y entregado a Propublica, que ante los incesantes y desgarradores llantos y súplicas de los niños, revela las burlas de algunos miembros del personal de esas instalaciones carcelarias para menores. O una niña de 6 años que memorizó el teléfono de su tía y que le pidió a una ayudante llamar por teléfono a su pariente para que viniera a recogerla, repetidos hoy constante e ininterrumpidamente en los mayores noticiarios de la nación, han comenzado a tener efecto en algunos congresistas republicanos que piden ya detener la crueldad de la administración y se apresuran hoy mismo a introducir inciativas de ley para frenar lo que consideran las «crueles políticas de esta administración», que están causando tanto daño en los niños y el escarnio público para esta nación entera en el resto del mundo.
Aquí el audio donde ante el llanto generalizado de los niños un guardia se escucha que dice: “Bueno, aquí tenemos una orquesta…”.
Escuche:
Hasta senadores republicanos como Ted Cruz, precisamente de Texas, donde se hallan estos campos de concentración infantil, están pidiendo detener dichas políticas de la administración Trump; y asegura estar introduciendo una legislación para evitar que los menores sean separados de sus padres cuando son detenidos en la frontera.
Otros legistas han puntualizado que se trata de políticas que si bien han sido largamente anunciadas, desde por ejemplo los debates de Trump con Hillary Clinton en la pasada campaña por la presidencia, y luego al inicio de esta administración, para más tarde ser puestas en vigor por el Fiscal General de la nación, Jeff Sessions en abril, «no son como afirma el gobierno federal lo que dice La Ley de Inmigración”; sino sólo directrices turnadas por esta administración, que no han sido escritas ni aprobadas por el Congreso. Otros legisladores republicanos también anunciaron a la prensa que la Ley de Inmigración no sanciona como delito el hecho de entregarse a las autoridades en los puntos de entrada a Estados Unidos en la frontera para pedir asilo, sino como un delito menor o una falta administrativa.
Hoy sin embargo la crueldad que se le está aplicando a los menores detenidos lejos de sus padres fue defendida por la propia Secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen desde el podio del salón de prensa de la Casa Blanca, con una actitud calificada por los medios de insensible y falsa. Nielsen quiso omitir la verdad de los hechos divulgados por grupos de congresistas federales y especialistas en el campo de la salud mental, además de por avezados periodistas tras visitar a los niños detenidos.
Por otro lado, un grupo de legisladores demócratas, encabezado por la senadora de California, Kamala Harris esta pidiendo la inmediata destitución de Kirstjen Nielsen.
Y hoy la Fiscal General de Nueva York se unió a una coalición de 21 Fiscales Generales pidiendo al Secretario de Justicia de Estados Unidos, Jeff Sessions, “poner fin a los ataques crueles e ilegales de la administración Trump contra niños y familias que intentan obtener legalmente asilo en Estados Unidos, mientras buscan protección contra violencia doméstica, sexual y de pandillas”.
Como se sabe, el propio Sessions dictó cambios en las políticas que regulan el comportamiento de las autoridades de Inmigración en la frontera sur, señalando que ni la violencia doméstica y sexual, ni la crueldad de las pandillas son ya causa suficiente para otorgar asilo.
“En las últimas semanas, el gobierno federal ha reclasificado el estado de protección de los sobrevivientes de violencia doméstica internacional”, dice el comunicado de la Fiscalía de Nueva York. En una carta a Sessions, la coalición de fiscales estatales exige que la administración deje de poner a los niños en peligro al separarlos de sus familias.
«La administración de Trump está alejando a los niños de sus padres sólo para promover una agenda política draconiana. Esto no sólo es inhumano y totalmente irrazonable, sino que también socava nuestra seguridad pública», dijo la Fiscal General de Nueva York, Bárbara Underwood.
«Esto no es lo que somos como país, y nuestra coalición de Fiscales Generales continuará actuando para proteger a las personas a las que servimos y el estado de derecho», dice el comunicado. Sin embargo, varios expertos en politica e historiadores entrevistados por la prensa nacional han dicho al aire que «mas bien esto es lo que somos».
Otros Fiscales Generales escriben: «La separación deliberada de los niños y sus padres que buscan asilo legal en Estados Unidos está mal… Exigimos que se revoquen de inmediato».
Además, los gobernadores republicanos de Maryland, Larry Hogan, Massachusetts, Charlie Baker, Colorado, John Hickenlooper, y el demócrata de Nueva York, Andrew Cuomo rechazaron la petición de Trump y decidieron no desplegar los recursos de la Guardia Nacional en la frontera, en protesta por las separaciones familiares■