Noticiero Latino, Nueva York
La fecha del 31 de marzo se aproxima aceleradamente y la administración Obama se siente apremiada porque no parece posible alcanzar los siete millones de nuevos usuarios para inscribirse en la ley de salud, que había prometido para este mes. Aunque hay pocas cifras claras, despachos de prensa coinciden en señalar que sólo se han inscrito al Obamacare unos 4.5 millones de personas. La aprehensión de la administración raya en la alarma, y el Presidente ha emprendido una serie de acciones para alcanzar las metas propuestas, incluidas nuevas exenciones y foros públicos.
En cuanto a los nuevos inscritos latinos se desconoce aun más las cifras reales de su inscripción a la ley de salud, pero se calcula que éstas serán muy bajas. Por eso Obama realizará en estos días un foro público con la comunidad latina, auspiciado por medios de comunicación latinos y en español.
De acuerdo con The Huffington Post, “la oficina del nuevo secretario de Seguridad Interna, Jeh Johnson envió un artículo suyo de opinión en español, a los medios en español”, en el que se refiere a las bondades de la Ley de Salud Asequible:
«Todos merecemos la seguridad y la tranquilidad que viene de tener una cobertura de salud que está ahí para nosotros, con la que podemos contar cuando más la necesitamos. La promesa de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio del Presidente Obama, un hito en la historia de este país, es hacer que la cobertura médica de bajo costo y de calidad sea más accesible. La Administración del presidente Obama está haciendo todo lo posible para asegurarse de que maximicemos el impacto de esta promesa, llegando a la mayor cantidad posible de aquéllos que son elegibles para inscribirse. Invito a las personas elegibles a que visiten Healthcare.gov o CuidadodeSalud.gov para ver sus opciones e inscribirse para el 31 de marzo».
Por otro lado, y de acuerdo con The New York Times de hoy, el gobierno de Obama tiene que bregar todos los días con las consecuencias políticas acarreadas por su ley de salud, e instigadas por sus opositores republicanos; y por eso el mandatario declaró ayer que permitirá a los consumidores renovar sus pólizas de seguro de salud vigentes, por los próximos dos años, aunque no cumplan con la fecha límite de inscripción decretada originalmente por la referida ley.
La fuente sostiene además que este anuncio de Obama busca posponer la desgastante lucha política de la Casa Blanca con el ala conservadora del Congreso, hasta pasadas las elecciones legislativas de noviembre. Como se sabe, el mandato de la Ley de Salud Asequible establece como fecha límite el 31 de marzo de este año, y quien no cumpla con este mandato tendrá que pagar un multa inicial de 95 dólares la primera vez que falle.
Este último indulto al que se refiere el Times se deriva de una serie de exenciones, prórrogas y acciones unilaterales de la administración, que han provocado las críticas tanto de los opositores como de los partidarios de la ley, argumentando que el presidente Obama estaba poniendo a prueba los límites de sus poderes, dice la fuente. Y agrega que “la acción refleja las dificultades a que el Sr. Obama se ha enfrentado, al tratar de incrementar el apoyo a la Ley de Asistencia Asequible, y el escándalo sobre su promesa -que más tarde reconoció que había sido exagerada-, de que la gente a la que le gustara sus planes de seguro podría mantenerlos, sin importar nada”. Además, los candidatos demócratas que se postulan este año a un puesto de elección popular están ejerciendo presión para defender la política interna del presidente. Y como se recordará, Obama anunció en noviembre pasado un aplazamiento de un año para que los propietarios de negocios con más de 50 empleados acataran los planes de seguro de la referida ley de salud de 2010.
Otra filosa arista de este agudo problema es el asunto de los indocumentados, que si bien no son beneficiados por la referida ley de salud, alimentan todavía diversos temores cuando pertenecen a lo que conocemos como familias mixtas; es decir, que están compuestas por miembros con residencia legal y hasta con ciudadanía, además de personas indocumentadas. Uno de estos temores estriba en que a la hora de inscribirse al Obamacare tiene que dar información personal que puede conducir al escrutinio por parte del gobierno federal, que se ha distinguido por ser el que más indocumentados ha deportado en la historia, y que al parecer piensa seguir haciéndolo a juzgar por la partida presupuestaria asignada para tal propósito en el presupuesto del gasto público federal.
Dichos temores persisten, no obstante que la administración se ha cansado de repetir en medios de información electrónicos y escritos, así como en foros públicos que no se compartirá esta información entre las agencias federales, y que nadie debe temer a ser encausado legalmente a partir de la información provista para enrolarse en el Obamacare. En el foro público que realiza a diario Radio Bilingue, Línea Abierta, hemos podido constatar que dicho temor existe entre la población latina. Y es que como se sabe, al llenar la solicitud de ingreso o al escoger un plan de salud el formulario pregunta información sobre los miembros de la familia; o sea, sobre el estatus de los miembros de una familia ya sea homogénea o mixta.
Con todo, y sea como fuere, el próximo 31 de marzo vence el plazo de inscripción a la Ley de Salud Asequible, y no hay duda que ésta representa un beneficio para millones de personas sin seguro médico, una de las principales causas de la bancarrota cuando la enfermedad toca a la puerta de una familia, sea ésta pobre o acomodada. Así como tampoco se puede negar que a un país cuya población envejece -con la mayoría de los llamados baby boomers allanando el presente-, le conviene contar con una población asegurada, que tenga la posibilidad de acceder a cuidados médicos preventivos, que abaratan los costos de la atención de la salud de una nación, por cierto siendo los de este país los más caros del mundo desarrollado.