El tema del cambio climático expresado por ejemplo incendios, inundaciones y sequías, ha tenido una amplia difusión últimamente. Sobre todos los incendios en el Oeste estadunidense, que devastado considerablemente inmensas zonas de bosque y de maleza. Pero que dichos incendio, con la contaminación del aire que provocan pudieran propiciar el contagio de Covid-19 es una novedad.
De la redacción
Un nuevo estudio de científicos de Nevada argumenta que “el humo de los incendios forestales puede aumentar el riesgo de contraer el coronavirus”. El estudio, publicado la semana pasada por científicos del Desert Research Institute, encontró que “las tasas de infección por coronavirus aumentaron desproporcionadamente durante la temporada de incendios forestales en 2020, cuando el humo de los incendios en los estados vecinos cubrió gran parte del norte de Nevada”.
Por su parte, en un artículo del Journal of Exposure Science & Environmental Epidemiology, el científico asistente de investigación del Desert Research Institute, Daniel Kiser y cuatro coautores señalan que “la tasa de positividad de la prueba -de covid- en el condado de Washoe aumentó significativamente durante los períodos en los que los monitores midieron altos niveles de partículas en el aire de humo de incendios forestales”.
El estudio dice que en cada 10 microgramos por metro cúbico de partículas pequeñas conocidas como PM2.5 en el aire, “la tasa de positividad aumentó aproximadamente un 6.3 por ciento de dos a seis días después”.
Kiser afirmó a Prensa Asociada que “el estudio fue observacional, y señaló que el repunte podría atribuirse a otros factores, como el segundo aumento del año pasado, el regreso de los estudiantes a las escuelas o los cambios en las restricciones locales”.
Pero agregó que “los aumentos momentáneos durante los períodos de alta contaminación sugirieron una conexión entre el humo y la propagación del virus. Esa asociación temporal en medio de un gran repunte en los casos en general es lo que nos convenció de que algo está pasando».
Y es que la presencia y rápida propagación de la variante del coronavirus conocida como Delta, con una altísima capacidad de propagación, ha elevado los índices de infecciones en todo Estados Unidos.
Por ejemplo, durante las últimas dos semanas Nueva York se ubica en el décimo estado del país con mayor número de casos de COVID-19, con un aumento del 167 por ciento en el número de casos, y actualmente está reportando al menos 880 nuevos casos por día.
Y en Texas, el condado de Dallas experimenta hoy día un 40% en el incremento de casos, y en el condado de Tarrant el salto llegó al 65%. Las hospitalizaciones también aumentaron, mientras el nuevo número de vacunaciones sigue estancado, a pesar de que hay una mayor disponibilidad de la vacuna en muchas partes.
Y es que lo que también creció fueron las campañas de desinformación en las redes sociales, donde se dice que unas seis «personas» o entidades son responsables del 60% de dichas campañas de desinformación en Facebook. Y se preguntan: ¿Debe intervenir el Congreso?
Los autores del estudio del Desert Research Institute argumentaron que la asociación entre el humo de los incendios forestales y el coronavirus probablemente sugiere que la contaminación hace que las personas sean más propensas a los virus en general.
“Nuestros hallazgos –escribieron- también refuerzan los argumentos de otras fuentes acerca del aumento de las PM2.5, con el tráfico vehicular o la actividad industrial, que aumenta la susceptibilidad al coronavirus.
El autor principal, Kiser dijo a la fuente que “es probable que los incendios forestales y otros eventos climáticos impulsados por el cambio climático figuren más en el estudio de los virus en el futuro. El humo de Tamarack Fire y Beckwourth Complex Fire está cubriendo partes del norte de Nevada, causando contaminación en Reno, Carson City y Gardnerville».
Y como dijimos ayer en este mismo espacio informativo, también “Arde el Oeste de EE UU, con pastos secos y vientos que avivan el fuego”.
El incendio, Bootleg Fire es “uno de los más grandes y destructivos incendios en la historia moderna de Oregón”, que ha quemado ya más de 476 millas cuadradas; o sea, mil 210 kilómetros cuadrados, “un área aproximadamente del tamaño de Los Ángeles”.
Las llamas se expanden en la frontera de Oregon con California, donde en días y semanas pasadas los incendios forestales devastaron enormes extensiones de bosques secos. Hasta el lunes, el incendio, que se halla justo al norte de la frontera de California estaba contenido apenas en un 25%. Oregon por su parte ha registrado en los últimos 15 días, un aumento del 154% en los casos de Covid-19 (incluidos los provocados por la variante Delta).
Durante las últimas dos semanas, grandes zonas de California que también han sido arrasadas por los incendios, ha visto un cambio en el número de casos de contagio del ¡301%!
Mientras que el estado de Washington ha sido presa de los incendios también, y afectado por el fuego; el estado registró en las últimas dos semana un 196% de incremento de casos de contagio.
Cifras del Centro para la Prevención y Control de las enfermedades, CDC, sostienen que casi todas las muertes recientes por coronavirus han recaído en personas que no están vacunadas■