De La Redacción

Y sin depender del aumento de impuestos, los creadores del presupuesto se vieron obligados a hacer malabares para balancear el presupuesto, mientras aplacan a los halcones de la defensa, dice la fuente, que claman por un aumento del gasto militar.

Con un presunto llamado a la racionalización, el empoderamiento de los estados o «el logro de la sostenibilidad», los republicanos de ambas cámaras del Congreso redactaron su plan de gasto para la nación con recortes de 5.5 millones de millones de dólares en más de 10 años, reporta The New York Times.

Entre otros recortes, el plan contiene más de mil millones de dólares en ahorros o recortes no especificados a programas como cupones de alimentos y el bienestar social (wellfare). Además, su presupuesto exige la derogación total de la Ley de Asistencia Asequible, incluyendo los aumentos de impuestos que financian la ley de salud y propone también recortar el Medicaid.

No obstante, el plan cuenta con el mismo nivel de ingresos federales –vía impuestos- durante los próximos 10 años, o sea los mil millones de dólares que la Oficina de Presupuesto del Congreso preveía con dichos aumentos de impuestos que el plan republicano pretende desaparecer.

Su propuesta, dicen, logrará balancear el presupuesto, contando con 147 mil millones dólares en crecimiento económico «dinámico», resultado del estímulo económico que generarán las políticas que establecen en el papel. Afirman que en 2024 su presupuesto produciría un excedente de 13 mil millones de dólares, gracias en parte a 53 mil millones contemplados en una proyección de «impacto macroeconómico» generado por las referidas políticas republicanas. Ese superávit –insisten-, crecería en 33 mil millones en 2025, y con el impacto macroeconómico, ascendería a 83 mil millones de dólares.

Los programas nacionales o para las necesidades domésticas se reducirían 519 mil millones dólares por debajo del tope –de por sí restrictivo- establecido en el presupuesto de 2011. La Casa Blanca estima que entre la derogación de Ley de Asistencia Asequible y los recortes a Medicaid, 37 millones de personas perderían el seguro de salud, o más del doble de los no asegurados.

Y sin depender del aumento de impuestos, los creadores del presupuesto se vieron obligados a hacer malabares para balancear el presupuesto, mientras aplacan a los halcones de la defensa, dice la fuente, que claman por un aumento del gasto militar. El referido presupuesto republicano agrega casi 40 mil millones de dólares en fondos «de emergencia» para la guerra, en el presupuesto de defensa del próximo año, elevando el gasto militar sin topes estrictos, con lo que técnicamente rompen los lineamientos impuestos por la Ley de Control de Presupuesto de 2011.

Algunos republicanos moderados se muestran escépticos ante dicho presupuesto (McCain-R AZ), y otros hasta lo tildan de ridículo (Ken Buck-R CO)

Al respecto y en conferencia desde la Casa Blanca, el presidente Obama declaró: «Lo que estamos viendo ahora es más bien una falta de inversión en la educación, la infraestructura, la investigación y la defensa nacional. Todas las cosas que necesitamos para crecer, para crear puestos de trabajo, para mantenernos a la vanguardia de la innovación, y para mantener seguro a nuestro país”■

Gráfica comparativa entre los presupuestos de Obama y el de los republicanos (inglés)