Kristian Hernández
Hispanic Link News Service
Mientras demora y esquiva sus responsabilidades el Congreso de Estados Unidos, en cuanto a resolver nuestra crisis migratoria, el grupo de rock, La Santa Cecilia, galardonado con un premio Grammy y que tiene como integrante un inmigrante indocumentado que toca requinto y acordeón, ha declarado sin reparos, por televisión nacional y en horario estelar su posición a favor de los inmigrantes.
El 26 de enero estoss músicos de Los Ángeles, galardonados con el Grammy por su álbum, Treinta días, dedicaron su premio a los más de 11 millones de inmigrantes indocumentados que viven en Estados Unidos.
Con los brazos muy abiertos, como abrazando a los fanáticos de las estrellas de la música pop, en el Staples Center de Los Ángeles, y a los 28.4 millones de televidentes esa tarde dominical, Marisol Hernández gritó con su chasquido estilo Janis Joplin, “¡Viva la música! Qué linda es la migración”.
Hernández, mejor conocida por “La Marisoul”, partió del escenario con el primer Grammy de la banda, para la categoría “Mejor álbum de rock latino, urbano o alternativo”.
“Treinta días, su primer álbum, salió en abril bajo ël sello discográfico, Universal Music. A Hernández le siguieron los otros integrantes del grupo, incluyendo José Carlos, el indocumentado de la banda.
Carlos es del estado de Oaxaca, en el sur de México. Llegó a Estados Unidos con sus padres a la edad de seis años. La canción, El hielo, (ICE), en referencia a la Agencia de Inmigración y aduanas del gobierno federal estadunidense, narra la historia de tres trabajadores indocumentados, uno de ellos modelado en la historia de Carlos.
“Nos da orgullo ser hijos de padres inmigrantes, y dedicamos este premio a los más de once millones de personas indocumentadas que viven y trabajan muy duro, y que necesitan llevar una vida de mayor dignidad en este país”, dijo Hernández al aceptar el premio.
El grupo lleva el nombre de La Santa Cecilia, santa patrona de la música. Sus canciones son de letra bilingüe, y de temática multicultural, ilustrando la experiencia particular de los latinos en Estados Unidos.
Su sonido es un caldero de música mexicana tradicional y cumbias, boleros, tango, rock y pop, untado con un ritmo afrocaribeño, y con una inmensa guarnición de soul latino. En una entrevista por video con Cafecito, del canal NBC Latino, el grupo explica que la mezcla de todas estas influencias, para ellos, es tan fácil como hablar el espanglish.
El año pasado el grupo tocó durante la manifestación de los inmigrante en Washington, D.C., y han sido nombrados “artistas hispanos al alza, a los que hay que seguir”, por Advertising Age.
Desde su inicio en la calle Olvera de Los Ángeles, cuando eran adolescentes, La Santa Cecilia ha grabado dos discos de larga duración (LP): “Noches y citas”, y “El valor”, que se volvieron a editar bajo el sello Universal Music en julio.
(Kristian Hernández egresó recientemente de la Universidad de Texas en El Paso, y es reportero independiente ahora en Washington, D.C.)
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