Bertha Ramo, madre con hijo de 23 años, discapacitado.
California goza este año de miles de millones de superávit fiscal. En su revisión del presupuesto, el gobernador Jerry Brown propone destinar gran parte de ese excedente en pagar parte de la deuda y ahorrar un fondo para gastos imprevistos. Además, Brown gastaría como nunca en la educación básica y crearía un nuevo crédito fiscal para los contribuyentes de más bajos ingresos. Aun así, agrupaciones que representan a los pobres advierten que el gobernador Brown debía usar esta oportunidad para restituir los fondos millonarios recortados durante la recesión a importantes programas de seguridad médica y servicios humanos que cubrirían a los indocumentados y los más pobres. El plan de gastos final se fijará luego de negociaciones este verano entre la legislatura y el gobernador. Nuestro corresponsal en Los Ángeles, Rubén Tapia, recogió la voz de algunos afectados.
Uno de los grupos que quedaron decepcionados con el nuevo presupuesto del gobernador de California, Jerry Brown, son las proveedoras de cuidado a domicilio para personas con discapacidades. Bertha Ramo tiene un hijo de 23 años de edad que sufre discapacidad severa.
“Tiene parálisis cerebral, retraso profundo, músculos hipotónicos, no camina, no agarra. Es un bebé de nueve meses, hay que bañarlo, hay que hacerle todo lo que el necesita”, dice Ramo.
Ramo asegura que su hijo nació discapacitado a causa de negligencia médica. Trabajaba en una tortillería y se vio obligada a renunciar para poder cuidarlo. Aun así, batalló durante 3 años para que le dieran ayuda económica. Durante 20 años ha recibido ayuda, pero hace dos años por la crisis fiscal, el Estado recortó 7 por ciento sus ingresos.
“Ahorita me están dando 654 dólares”
Esta cantidad mensual no le alcanza para pagar la renta de su modesto apartamento en Los Ángeles, de 800 dólares. Puede sobrevivir con la ayuda de sus familiares, pero ahora no tiene más ingresos.
“Mi esposo ahorita está incapacitado porque se lastimó la espalda y espera una cirugía. Me las estoy viendo muy mal económicamente”
Se calcula que hay más de 135 mil proveedores de casa en California en situaciones similares desde que comenzó la recesión. La señora Ramo decepcionada cuestiona el voto que asegura le dio al gobernador Brown en las pasadas elecciones. Esperaba que él revirtiera esta reducción.
“Es triste que una persona como el gobernador Brown…, que cuando pido el voto, se lo dimos”
Muchos otros sectores de los más marginados quedaron fuera del nuevo presupuesto también: los jóvenes estudiantes que fueron criados en hogares sustitutos ya no tienen ayuda para su renta y comida mientras estudien. Los desempleados y los que reciben estampillas de comida no recibieron los aumentos que podrían cambiar sustancialmente sus vidas.
Angelica Salas, Directora Ejecutiva de CHIRLA
Lo que sí hizo el Gobernador Brown fue proponer un crédito fiscal para los más pobres. También incluye un fondo para ayudar a los inmigrantes a solicitar DACA y DAPA, destaca Angélica Salas, directora ejecutiva de la Coalición para los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los Ángeles, o CHIRLA.
“Puso en su presupuesto 5 millones de dólares para que las organizaciones tengan el personal para poder ayudar a nuestra gente, no es suficiente pero es un comienzo muy positivo”, dice Salas.
Pero los números de los posibles beneficiarios en California son muchos y se necesitan más recursos, señala Carlos Amador, del Centro de Políticas de los Inmigrantes de California:
“Aquí en California hay aproximadamente 1.2 millones de personas indocumentadas que se van a beneficiar del nuevo programa de acción ejecutiva de Obama, y estamos tratando de obtener el apoyo del gobierno con 20 millones de dólares para educación y servicios”
La negociación del presupuesto termina en junio. Mientras tanto, los defensores de los inmigrantes y de los más pobres del estado seguirán negociando con el gobernador y con la legislatura. Una de estas negociaciones está dirigida a que el gobernador apoye la propuesta de seguro médico para los indocumentados, señaló el presidente del Senado estatal, Kevin de León, durante un evento donde se reconoció el Día del Inmigrante en las escalinatas del Capitolio estatal en Sacramento.
“Nos cuesta mucho el acceso al cuidado médico, particularmente en las salas de emergencia a lo largo y ancho del estado de California, por eso queremos invertir dinero a través del programa SB4 del Senador Lara. Obviamente tenemos que hacer nuestro cabildeo, negociar con el gobernador”■
