Los migrantes esperan el acceso para solicitar asilo en los EE. UU. En el punto fronterizo de El Chaparral en Tijuana, México, el lunes 27 de noviembre de 2018. Foto: The Nation.
De la redacción
Los centroamericanos estacionados ahora en la frontera de México con Estados Unidos enfrentan un nuevo desafío, tras el cierre hostil a su paso por parte de las autoridades de ambos países. Unas, las mexicanas, atajando el curso de los migrantes hacia la frontera para entregarse a los agentes de migración estadunidense y solicitar asilo; y otros, el gobierno federal de Estados Unidos además de arrojar bombas lacrimógenas a esas familias, negándoles la posibilidad que brinda la ley de Inmigración estadunidense -o en clara violación a su propia ley-, a todo solicitante de asilo.
La Ley de Asilo de Estados Unidos, que le ha dado fama de ser altamente humanista este país establece que se debe aceptar a todo aquel quebusque asilo; que se le debe dar una fecha de comparecencia ante la autoridad competente, que deberá esperar en suelo estadunidense hasta que dicha autoridad determine si son legítimas las razones que acompañan la solicitud, si el miedo que dicen tener y por el cual han huido de sus países de origen es creíble.
Sin embargo, ante el terrible panorama que se ha generado en varios puertos de entrada a Estados Unidos, como en Tijuana, por ejemplo, se vive una crisis legal y precarias condiciones de salud, física y mental, de higiene, y se sufre la intolerancia antinmigrante de personas en ambos países.
En línea para entregarse a las autoridades de Inmigración y pedir asilo, en la frontera de Tijuana Sa Diego. Foto: Spectrum News.
Pero las buenas noticias es que esos migrantes no están solos. Personas y grupo de la sociedad civil se han dado a la tarea de asistirlos en distintos frentes, rebasando incluso la presencia y actividad de entidades nacionales e internacionales, como la ONU y su brazo encargado de asistir estas crisis humanitarias, por ejemplo, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
Una crónica amplia y elocuente de la situación en Tijuana puede leerla en La Jornada, abriendo el enlace de abajo:
Para muchos integrantes de la caravana el sueño terminó
Una muestra de solidaridad artística con raíces clavadas en la historia de la humanidad puede apreciarla en el siguiente enlace:
«>Derriben este muro», claman músicos alemanes con concierto en Tijuana
Y una muestra de solidaridad, empatía y civismo, tomada de un posteo en el Facebook puede leerla -sin editar- a continuación:
Xiomara E Corpeno e Ingrid Chapman pasamos el fin de semana de Acción de Gracias trabajando directamente con las familias que caminaron a Tijuana desde Centroamérica en busca de asilo.
Queremos compartir lo que hemos presenciado y hacer un Llamado a la Acción y de Solidaridad con las Caravanas de los Refugiados:
Vimos a miles de personas al aire libre en un complejo deportivo cerca del cruce de la frontera de los Estados Unidos. Están esperando la oportunidad de presentar una solicitud de asilo en San Ysidro.
Caminando hacia la puerta de entrada a EEUU para poder solicitar asilo. Foto. Facebook
Estos refugiados describen situaciones de huida en las que ya les han matado a miembros de su familia, se han hecho amenazas específicas contra ellos, o la extorsión económica y el hambre los han expulsado de sus hogares.
El gobierno de los Estados Unidos se ha negado a enviar más personal para procesar las solicitudes de asilo, pero si ha enviado soldados. El domingo, agentes de la Patrulla Fronteriza y de Aduanas lanzaron gases lacrimógenos contra un grupo de refugiados que habían participado en una marcha para llamar la atención sobre su situación.
En otras palabras, las mismas personas que quieren que estos refugiados «ingresen legalmente» han hecho casi imposible que puedan ejercer su derecho legal de solicitar asilo.
La gente está durmiendo en el estadio al aire libre. La semana pasada llovió y perdieron las pocas posesiones que les quedaba. Muchas personas ya padecían resfriados y están desarrollando enfermedades respiratorias más graves. El clima desértico de Tijuana es muy parecido al del sur de California, con un sol tremendo durante el día y un frío del desierto durante la noche, especialmente al amanecer.
Las ONG internacionales de refugiados NO son visibles en ningún lugar en este momento. Las personas con las que hablamos de la ONU dijeron que querían hablar con nosotros cuando nos vieron distribuyendo carpas, pero nunca nos devolvieron la llamada.
En su lugar, la gente común de conciencia recaudó dinero, compró tiendas de campaña, recogió ropa y sacos de dormir y los distribuyó durante el fin de semana. Como más personas necesitaban tiendas de campaña de las que estaban disponibles, priorizamos entregárselas a mujeres embarazadas, familias con niños pequeños y personas discapacitadas. También priorizamos la distribución de leche en fórmula para bebés, pañales y ropa interior.
Los niños migrantes descansan en el suelo frente a una fila de policías mexicanos con equipo antidisturbios, después de que intentaron cruzar el cruce fronterizo de Chaparral en Tijuana. Foto: Free Press.
Muchas personas usan los mismos zapatos que han usado en la caminata de más de 5,000 kilómetros a Tijuana. Aunque todas las donaciones son apreciadas, era evidente la necesidad de zapatos de tenis, ropa de tamaño pequeño (muchas personas están delgadas de caminar muchas millas con acceso intermitente a buenas comidas) y toallas sanitarias.
También colaboramos con otros activistas que han creado casas seguras para personas LGBT en la caravana. Apoyamos a varios grupos de refugiados LGBT en su auto-organización para establecer un par de hogares seguros, donde los refugiados rotan los roles y el liderazgo.
También hay autoorganización dentro del estadio. Nos hemos contactado con algunos de estos líderes para hacer coincidir las donaciones con las necesidades reales de los refugiados. También estamos apoyando a aquellos que han asumido roles de liderazgo y a la comunidad que han construido en el camino.
La operación en el estadio está a cargo de los infantes de marina mexicanos. Hay una presencia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos de México y agencias públicas estatales y locales, pero es muy limitada para las necesidades. Los refugios para migrantes que ya existían en Tijuana, administrados por personas religiosas, tienen exceso de capacidad. El alcalde de Tijuana ha pedido al gobierno federal que brinde ayuda y solicite ayuda adicional de agencias internacionales. Al principio, él había declarado que «los derechos humanos son para aquellos que son ‘humanos derechos’. Aunque desde entonces ha declarado que esas declaraciones se tomaron fuera de contexto, su posición sigue siendo que no se gastarán más recursos locales para cumplir con la necesidad humanitaria.
En contraste con la atmósfera de resentimiento y odio que promueven los funcionarios públicos, hay increíbles conexiones humanas y actos de solidaridad cada minuto. Nuestro esfuerzo voluntario fue posible, por ejemplo, por un colectivo activista local de Tijuana que convirtió su cafetería vegana en una operación diaria donde los voluntarios alimentan, visten y conectan a la gente con asistencia médica y legal. Donde hemos podido, hemos reclutado personas que buscan ayuda para unirse a la distribución y abordar su deseo de ser agentes activos, no casos de caridad.
Gracias a quienes nos dieron las primeras bolsas de ropa y mantas y donaron a la llamada de Xiomara para donaciones financieras.
Migrantes llegando a la frontera para entregarse a las autoridades de Inmigración y pedir asilo. Foto: Youtube.
Tenemos 3 recomendaciones específicas en este Llamado a la Acción y de Solidaridad con las Caravanas de Refugiados:
1) Apoye los esfuerzos de autoorganización, liderados por personas comunes, y por activistas de confianza, especialmente aquellos que hacen contacto directo con los participantes de las caravanas. Para nuestra Raza, les pedimos que organicen y DIRIGAN un comité de solidaridad, que cree conciencia y recursos, y que organice delegaciones de voluntarios donde se encuentran los refugiados.
2) Si está pensando en ser voluntario, considere programar una sesión de preparación. Invite a alguien que ya haya voluntariado, y que puede compartir detalles básicos para ayudar a decidir cómo puede ser más útil.
3) Organice una reunión en casa, en linea, una reunión de su comunidad de fe, o cualquier tipo de discusión grupal entre sus redes para hacer los pasos #1 y #2 detallados aquí.
Xiomara ha continuado con la colaboración colectiva y puedes contactarla por mensaje, si deseas financiar los tipos de actividades que hemos descrito anteriormente.
En los Estados Unidos, le pedimos que llame a sus miembros del Congreso para exigir el fin de las demoras en el procesamiento de los refugiados para el asilo y la derogación de la ley de inmigración de 1996 que restringió el asilo y ha deportado a millones de personas a México y América Central. (202) 224-3121.
En México, nos unimos a los activistas que exigen que la administración federal entrante respete los derechos humanos de los refugiados, deje de ayudar a las administraciones estadounidenses a reprimir a los centroamericanos en México y cumpla sus promesas de regeneración nacional.
En América Central, nos unimos a los activistas que rechazan el gobierno pro-Trump en Guatemala, el gobierno ilegítimo de Honduras y la traición de la revolución de izquierda por parte del gobierno de El Salvador.
Gracias.
