Tras una sorpresivamente rápida aprobación de una de las más severas leyes antiaborto con que los estados gobernados por republicanos siguen asaltado a sus respetivas poblaciones, Oklahoma dice ¡Presente! En una votación de 70 a 14 la Cámara de Representantes del estado aprobó el martes la ley de marras, que penaliza hasta con diez años de prisión y 100 mil dólares de multa a quien infrinja la SB 612, que tras su aprobación en dicha cámara fue enviada de inmediato al gobernador, Kevin Stitt, quien ha dicho repetidamente que firmaría cualquier proyecto de ley contra el aborto.
La ley SB 612 de Oklahoma contra el aborto es parte de un impulso más grande de los republicanos en el nivel nacional para aprobar agresivas leyes antidemocráticas, en este caso contra los derechos reproductivos dela mujer, uno de sus temas favoritos.
En tanto, expertos afirman que la Corte Suprema consideraría socavar el derecho al aborto que ha existido durante casi 50 años con la ley vigente del ramo, derivada del caso de aborto, Roe vs Wade, cuando el máximo tribunal de la nación decida próximamente sobre el destino de un caso similar de Mississippi, lo que para muchos parece una burla a dicho precedente legal establecido por la Corte Suprema en 1973.
Pero la cosa no acaba ahí, defensores del acceso al aborto han advertido que Oklahoma es quizás el próximo campo de batalla sobre el tema, pues se sabe que en la legislatura estatal los republicanos barajan un amplio abanico de leyes antidemocráticas y restrictivas de los derechos civiles de los estadunidenses, y se espera que algunas sean votadas esta misma semana.
Se trata de una tendencia de las Legislaturas controladas por el Partido Republicano a nivel nacional, pero esta ley de Oklahoma es diferente por ejemplo a la recién promulgada por Texas (SB 8), que presumía ser la más severa del país, pues la SB 612 de Oklahoma no se basa en un mecanismo de aplicación al estilo de la texana, que designa a civiles para hacer cumplir la ley y ha demostrado ser difícil de cuestionar en una Corte.
Pero expertos aseguran que a la SB 612 le pasará algo parecido al resto de las leyes de los republicanos, o sea que se atorará en los tribunales. Pues como se ha visto, por el momento no ha habido un estado que haya hecho cumplir con éxito alguna de sus aberrantes legislaciones contra Roe v. Wade, que generalmente se ha interpretado como una protección del acceso al procedimiento de poner fin al embarazo hasta las 24 semanas.
Tras la firma del gobernador, Kevin Stitt, la ley antiaborto de Oklahoma entraría en vigencia hasta este verano, alineándose a la inminente decisión de la Corte Suprema sobre el caso de aborto en Mississippi, que de acuerdo con expertos, anularía Roe vs Wade o la debilitará drásticamente¶