Reportes recientes sobre el infierno que ha vivido el Oeste Estados Unidos, pero en esta ocasión el norte de California en particular, señalan que el peligro de poder enfrentar nuevos incendios forestales este año sigue latente, con olas de calor y sequía entre otras de las calamidades derivadas del cambio climático, que continua amenazando al planeta; como vimos recientemente con una demoledora serie de reportes de la ONU sobre el tema.
Marco Vinicio González
Sacramento se ve amenazado por una ola de calor de principios de primavera que podría superar hoy los 90 grados Fahrenheit, y subir más de 20 grados de lo normal (73º ) para este viernes, de acuerdo con registros del Servicio Meteorológico Nacional. Los récords diarios en esa ciudad esta semana han sido de 91 grados según dichos registros establecidos desde 1989.
Ya no pueden ocultarse las crecientes muestras de climas extremos cada vez más notables. Por ejemplo la sequía que golpea a California y la necesidad incluso de liberar grande volúmenes de agua, como los que reportamos recientemente de la Presa Friant, a través del canal Delta-Mendota lo constatan. Aunque claro, las lluvias recientes e intermitentes han ayudado, pero sólo un poco, porque su volumen ha sido escaso.
Al parecer, este será otro año malo para los incendios forestales de California. Como se recordará, el año pasado ardieron más de 2.5 millones de acres, “siendo las ciudades más afectadas, Grizzly Flats y Greenville… arrasadas por las llamas, y la evacuación sin precedentes de South Lake Tahoe, cuando el Caldor Fire corrió hacia la cuenca del lago Tahoe”, dice The Fresno Bee.
Y es que las condiciones son propicias para los incendios forestales en California, que entran en su tercer año consecutivo de sequía, por lo que las condiciones atmosféricas se están conformando a modo para otra larga y peligrosa temporada de incendios forestales por efecto del cambio climático.
El Monitor de Sequía estadunidense había designado la semana pasada un poco más del 40 por ciento de condiciones de sequía «extrema” para California, en comparación con aproximadamente el 37% la misma temporada en 2021.
“Las regiones más secas incluyen partes del área de North Bay y el norte de Sacramento Valley, cada uno devastado por grandes incendios desde 2017. La sequía es una de las grandes preocupaciones, pero no es el único factor en el extraordinario riesgo de incendios forestales del estado”.
Por su parte Scott Stephens, profesor de ciencias de incendios forestales y director del Laboratorio Stephens en la Universidad de California (UC) en Berkeley, señaló a la fuente que “La vulnerabilidad de los bosques californianos es realmente catastrófica”.
De acuerdo con Drought.gov, un sistema nacional de información sobre sequías, varias partes de California enfrentan condiciones anormalmente de sequía extrema, lo que “crea un paisaje ideal para alimentar las llamas”. Además, sostiene que la temporada de incendios forestales en el estado ocurre entre los meses de julio a octubre, y que por lo general «arrasa acres de bosque y maleza, así como hogares y estructuras, poniendo en peligro a las personas y al medio ambiente… A medida que el cambio climático y las condiciones de sequía continúan cambiando las normas ambientales, la temporada de incendios dura más”.
Según ReadyforWildfire.org, “su casa puede incendiarse con brasas que vuelan, llamas directas de un incendio o una casa en llamas cercana y calor radiante de plantas y edificios en llamas”. Y recomienda cómo hacer que su hogar “sea más resistente al fuego asegurándose de que su techo esté hecho con una composición de metal, arcilla o teja… También debe quitar las hojas y los escombros de su techo”.
Consejos de Cal Fire y el Condado de Sacramento para protegerse del fuego, tomado del Bee:
- Cubra las rejillas de ventilación con una malla metálica de 1/16 a 1/8 de pulgada.
- Instale ventanas de doble panel que tengan un panel de vidrio templado.
- Asegúrese de que las paredes estén hechas con materiales de construcción resistentes a la ignición, como estuco, retardante de fuego y madera tratada.
- Cubra las salidas de la tubería de la chimenea y la estufa con una pantalla no inflamable.
- Mantenga cerca los extintores de incendios, palas, rastrillos, cubetas y mangueras.
- Jardine con plantas menos inflamables, como aloe, rosas de cobertura y cactus.
- Informe los peligros de las líneas eléctricas.
- Cree un plan de evacuación que incluya rutas de escape a pie y en automóvil.
- Prepare un kit de suministros de emergencia.
- Instale detectores de humo y asegúrese de que funcionen correctamente¶