De la redacción
Un informe detallado sobre las muertes en niños y adultos jóvenes en Estados Unidos a causa del Covid-19, arrojó luz este martes sobre los patrones observados en pacientes mayores. Entre febrero y fines de julio examinó 121 muertes de menores de 21 años por coronavirus y encontró que “al igual que los adultos mayores muchos jóvenes tenían una o más afecciones médicas similares, como problemas pulmonares, asma, obesidad, problemas cardíacos o afecciones del desarrollo, en una relación proporcional con los latinos, negros, indios americanos o nativos de Alaska”, reporta AP / Kaiser Health News.
El ‘Informe Semanal de Morbilidad y Mortalidad de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, CDC’, encontró entre otras cosas que sin embargo no todas las muertes fueron igualmente comunes sino que se repartieron de forma desproporcional por etnia y por raza. De los 121 menores, “54 eran hispanos, 35 eran negros y 17 eran blancos”; una población esta última mayor a la de afroestadunidenses y latinos, según el referido informe realizado por los CDC.
En otras palabras, el informe halló que en general de las 121 personas menores de 21 años que murieron por complicaciones de Covid-19, el 45% eran latinos; el 29% negros; el 14% blancos; y el 4% indígenas estadunidenses o nativos de Alaska. Pero el 65% por ciento de los casos fatales ocurrió entre niños y adultos jóvenes con problemas médicos existentes, más comúnmente enfermedades pulmonares crónicas como asma, y también obesidad, afecciones neurológicas o del desarrollo y afecciones cardíacas.
El Dr. Andrew Pavia, experto en enfermedades pediátricas infecciosas de la Universidad de Utah, pero que no participó en el estudio de los CDC, comentó a Prensa Asociada sobre dicho estudio: “Es realmente bastante sorprendente. Es similar a lo que vemos en los adultos y puede reflejar muchas cosas, incluso que muchos trabajadores esenciales que tienen que ir a trabajar son padres negros e hispanos”.
Hasta el momento en que se revelaba el estudio las muertes de jóvenes informadas por los CDC eran muy pocas, apenas el 0.08 por ciento del total de muertes por esta causa en Estados Unidos, que se acerca por estos días a las 200 mil defunciones. “Aunque los niños y los adultos en edad universitaria representan el 26% de la población de EE. UU”, dice el estudio.
Una rara afección relacionada con el coronavirus y conocida como síndrome inflamatorio multisistémico, que “puede causar hinchazón y problemas cardíacos”, cobró 15 de esas 121 vidas. “Casi dos tercios de las muertes fueron en hombres y aumentaron con la edad. Hubo 71 muertes entre los menores de 17 años, incluida una docena de bebés. Las 50 muertes restantes tenían entre 18 y 20 años”. Lo que se suma a la evidencia de que los niños más pequeños generalmente tienen menos probabilidades enfermarse gravemente de Covid-19, y aun así, dice el estudio, “el 10% de los casos fatales ocurrió en niños menores de 1 año”.
El Dr. Pavia afirma que la ciencia sigue tratando de entender “por qué las enfermedades graves parecen volverse más comunes a medida que los niños crecen”. Dice que una teoría afirma que “los niños pequeños tienen menos sitios en la superficie de sus vías respiratorias a los que el coronavirus puede adherirse”. Y que otra apunta a que “los niños pueden ser menos propensos a una reacción exagerada peligrosa del sistema inmunológico al coronavirus”■