De la redacción
Sin aceptar responsabilidades por el prolongado retraso de la ayuda económica para lidiar con la pandemia de Covid-19, demócratas y republicanos quieren llegar a un acuerdo antes de que termine el año. El líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell señaló a la televisión que todavía puede ser posible un acuerdo, de 908 mil millones de dólares, en torno al paquete adoptado por ambos partidos el miércoles, aunque muchos califican las declaraciones de McConnell de poco genuinas.
El fin de año y el repunte de los peor de la pandemia, quizás, además de los oscuros resortes que mueven el aparato de gobierno en los pasillos del poder, demócratas y republicanos negocian en torno a un plan o compromiso para aprobar 908 mil millones de dólares, que los demócratas parecen haber adoptado el miércoles, dice la prensa.
Como se recordará, el plan o propuesta legislativa para hacerle frente a los estragos de la pandemia, o Ley de los Héroes de los demócratas para paliar los efectos de la pandemia en la salud, el desempleo la ayuda a los estados, los desalojos, etcétera, proponía en marzo un paquete de ayuda pandémica de 3.2 billones de dólares (trillones para Estados Unidos), sometida al Senado desde mayo pasado y bloqueados desde entonces por del líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell.
Tras nuevas negociaciones con el Secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, los demócratas aceptarían en el verano restarle mil billones a su plan, dejando ese proyecto en 2.2 mil billones de dólares, que tampoco satisfizo a los republicanos ni a Trump. Luego vendría la HEAL Act, un simulacro de proyecto de ley de ayuda por la pandemia de los republicanos.
Con todo, la alternativa actual de McConnell, de 908 mil billones no proporciona fondos para los gobiernos estatales y locales, ni reactiva los pagos vencidos del fondo federal por desempleo. Vale anotar que el dinero restante del fondo de ayuda por desempleo –si es que queda alguno-, las moratorias al desalojo en varios lugares del país, y otros programas de ayuda expiran en cuestión de semanas.
Sin embargo, los planes de los propios republicanos parecen estar desarticulados entre sí. Y es que el miércoles, en una audiencia del Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, Mnuchin fue humillado –aunque parece que ni se dio cuenta-, por la representante demócrata y exalumna de las escuelas de leyes de Harvard y Yale, y actualmente profesora de leyes en la Universidad de California en Irving.
A las preguntas de la congresista, Mnuchin, quien pretendió pasar falsamente por abogado y preguntó a Porter si ella era abogada, no sólo no supo responder a los cuestionamientos que se le hacían, sino que además mostró no estar preparado para un encuentro con la congresista, a pesar de que debió haber sabido que sería interrogado por ella.
Porter preguntó específicamente a Mnuchin sobre si apoyaba mover de regreso al fondo general del Tesoro 455 mil millones de dólares en alivio al COVID-19 que prpone Trump, antes de que termine su mandato. Esto dificultaría que al sucesor –Joe Biden- acceder a esos fondos de emergencia cuando tome posesión el 20 de enero y la pandemia esté haciendo mayores estragos, tras salir de los desplazamientos y encuentros masivos de la gente por las fiestas navideñas. Porter le recordó entonces a Mnuchin que según la Ley CARES, “los fondos restantes pueden de ese paquete pueden transferirse al Tesoro sólo a partir del 1 de enero de 2026″, cosa que Mnichin no sabía, o aparentó ignorar.
En recientes declaraciones recogidas por la prensa, McConnell dejó la puerta abierta para llegar a un acuerdo sobre una nueva ronda de estímulos para abordar los efectos de la pandemia, pero no llegó a respaldar abiertamente ni siquiera el plan de compromiso de los 908 mil millones de dólares que los demócratas adoptaron el miércoles; no pareció ser una concesión genuina.
McConnell dijo sin embargo que había sido «alentador ver algunas señales esperanzadoras» esta semana en las negociaciones de alivio de estímulo. “El compromiso está a nuestro alcance”, afirmó en un discurso en el Senado. “Sabemos dónde estamos de acuerdo. Podemos hacer esto. Permítanme decirlo de nuevo: podemos hacer esto y tenemos que hacer esto. Así que vamos a hacer una ley»■