Myriam Grajales-Hall (951) 781-2151
26 de agosto del 2015
Las elecciones generales de California en el 2014 registraron el nivel de participación más bajo de todos los tiempos, y los latinos y asiático-americanos continuaron siendo los grupos que salieron a votar en menor número.
La cifra general de votantes inscritos que acudieron a las urnas en el 2014 se redujo a un 41.7 por ciento comparado con un 58 por ciento en el 2010.
La falta de interés de los votantes californianos en las elecciones generales del 2014 atrajo la atención de legisladores, líderes cívicos y promotores electorales quienes están contemplando la adopción de reformas enfocadas a incrementar la participación electoral, especialmente de grupos étnicos como los latinos y asiático-americanos, quienes históricamente han registrado una baja asistencia a las urnas.
“La clave para poder lograr la participación de los votantes es identificar los factores que contribuyen a las disparidades electorales entre los latinos y asiático-americanos y el resto del electorado de California”, señala Mindy Romero, directora fundadora del Proyecto de Participación Cívica de California de la Universidad de California en Davis, en el reporte, California’s Latino and Asian American Vote: Dramatic Underrepresentation in 2014 and Expected Impact in 2016.
“Los latinos y asiático-americanos han votado históricamente en menor escala que el resto del electorado y en elecciones con baja participación, estos grupos típicamente participan aún menos, generando una brecha más grande entre ellos y los votantes anglosajones”, señala Romero.
La experta mantiene que las elecciones de noviembre del 2014 confirmaron este patrón, resultando en una participación “extremadamente baja” para los latinos y asiático-americanos, lo cual incrementó su subrepresentacion electoral en comparación con su proporción poblacional.
En las elecciones generales del 2014, la participación de los votantes inscritos de origen latino fue del 27.5 por ciento o sea, 18 puntos porcentuales menos que en el 2010.
Por otra parte, la experta destaca que a pesar de haberse registrado un incremento en la población e inscripción de votantes latinos en años recientes, el porcentaje de este grupo en el electorado californiano se redujo a un 15.4 por ciento en el 2014, siendo la primera baja de este tipo reportada en este grupo desde el 2006. En el 2014 los latinos representaban un 39 por ciento de la población general y solo un 28 por ciento de los ciudadanos elegibles para votar.
Por su parte, los asiático-americanos incrementaron su proporción en el electorado general durante el 2014 a un 7.4 por ciento, pero mantuvieron su subrepresentacion en base a su proporción poblacional en el estado (13.3 por ciento) y la población que es elegible para votar (12.4 por ciento).
En contraste, la participación de los votantes no latinos y asiáticos en las urnas durante el citado año fue del 47.3 por ciento. Este grupo de votantes está compuesto por un 82 por cientos de blancos y 14 por ciento de negros.
La tasa de participación y las disparidades son aún mayores entre los latinos y asiático-americanos cuando se toman en cuenta las cifras de quienes son elegibles para votar. Según Romero, el motivo principal de ello son las bajas tasas de inscripción de ciudadanos elegibles en el padrón electoral.
“Históricamente, las tasas de inscripción de votantes entre latinos y asiático-americanos de California han registrado niveles muy por debajo de los de la población general”, explica Romero.
Y las elecciones de noviembre del 2014 no fueron la excepción. En ese año, la inscripción general de ciudadanos elegibles al padrón electoral fue de 73.9 por ciento, comparado con un 62.8 entre los latinos y un 50.7 por ciento entre los asiático-americanos.
La inscripción de los votantes latinos por partido político, también ha registrado cambios en la década pasada, en la que cada vez menos de ellos se han afiliado a los partidos demócrata o republicano y se han inscrito como no partidistas o NPP, por sus siglas en inglés.
En el 2014, un 54.7 por ciento de los votantes latinos nuevos se inscribieron en el partido demócrata, un 17.3 por ciento en el republicano y 23.8 por ciento decidió no afiliarse a ninguno de los dos partidos. Para esas elecciones, el 61.3 por ciento de los votantes latinos pertenecían al partido demócrata, un 18.9 por ciento al republicano y un 16.3 por ciento se declararon no partidistas.
Una cosa que Romero hace notar en su reporte es que, en general, el Valle de San Joaquín y las regiones de Los Ángeles y San Diego cuentan con las tasas más bajas de participación de latinos y asiático-americanos elegibles para votar y tienen una representación significativamente menor entre los votantes inscritos, a pesar de encontrarse entre las regiones del estado donde existe la mayor población de estos dos grupos. Es realmente en la Costa Central y el área de la Bahía donde se registran las mayores tasas de participación de votantes latinos y asiático-americanos en comparación con el resto del estado.
Romero comenta que en los años venideros tanto latinos como asiático-americanos encabezarán el crecimiento poblacional de California y, que debido a ello, ambos grupos constituirán en el futuro una mayor proporción electoral; sin embargo, si las bajas tasas de participación electoral persisten en futuras elecciones, ello minará el impacto de su crecimiento poblacional en su fuerza política.
“Entender la conducta de los votantes latinos y asiático-americanos durante el 2014 es crítico para poder identificar el impacto potencial de estos grupos en el panorama político que se avecina en California”, señala Romero.