De la redacción
En la foto, Henry Muñoz, Presidente del Comité de Finanzas Demócrata, la actriz y activista, Eva Longoria, y el ex Secretario de Vivienda, Julián Castro.
En días recientes se dio a conocer en Línea Abierta un estudio, el primero en su tipo, cuyas conclusiones merecen estar permanentemente a la vista de todos, para conveniencia de casi todos: los antinmigrantes. Porque sus conclusiones son verdaderamente importantes. A tal grado lo son, que hasta el propio director de Noticias de Radio Bilingüe, Samuel Orozco sugirió pegarlas con un magneto a la puerta del refrigerador, como se hace con los recordatorios urgentes, para tenerlos presentes todos los días. Y no es para nada una mala idea. Se trataría de una lista de datos duros, como se dice en el argot científico, derivados de las contribuciones económicas de la comunidad latina a Estados Unidos, lo que la convierten en una importante fuente de ingresos y motor de la economía nacional, e internacional.
El estudio titulado, Reporte del Producto Interno Bruto Latino. Cuantificando el Impacto del Crecimiento Económico de los Hispanos de Estados Unidos, dice por ejemplo que “si el Producto Interno Bruto de los latinos que residen en Estados Unidos fuera un país autónomo sería ¡el séptimo! mayor en todo el mundo”. Mayor que el de India e incluso que el de Italia y Brasil. Y por si esto no fuera suficientemente sorprendente, agrega el estudio, se trata de una de las economías más dinámicas también: “El PIB de los latinos sería la tercera economía de más rápido crecimiento en el mundo, excediendo todas las expectativas”, dice a Línea Abierta el Dr. David Hayes-Bautista, distinguido profesor de medicina y director del Centro para el Estudio de la Salud y la Cultura Latina en la Escuela de Medicina David Geffen, de la Universidad de California en Los Ángeles, UCLA, y también autor del referido estudio.
Los latinos han crecido tanto en el sector productivo que si fuéramos un país aparte seríamos la séptima potencia económica mundial. Y esto, apenas empieza. Esa economía lleva buena aceleración, afirma el director de Noticias.
–Denos los detalles de sus conclusiones –Pregunta Orozco, también conductor de Línea Abierta.
“Bueno, como usted ha mencionado, i fuéramos un país por separado, seríamos el séptimo país en términos del PIB mundialmente. Y la tasa de crecimiento, entre las diez más grandes del mundo. Somos sólo el número tres, siguiendo a China, y a la India, y luego vienen los latinos de Estados Unidos”.
Agregó que los latinos cuentan “con una tasa de crecimiento el 70 por ciento más alta que la de los no latinos en Estados Unidos. Y como usted dijo muy claramente, las cosas están apenas comenzando. ¡Apenas!”.
Trabajadores de bajos ingresos en el sur de E.U. Foto: Southern Poverty Law Center.
Otros rubros del estudio son por ejemplo la fuerza laboral, señala el investigador.
“Los que van entrando a la tercera edad, los ‘baby boomers’, son en su gran mayoría anglosajones. Cada año, 500 mil salen o se jubilan de la fuerza laboral y ya no producen. Si no fuera por los latinos, de hecho, la fuerza laboral se haría más chica, cada año… Pero los latinos, como El Chapulín Colorado, para salvar la fuerza laboral, cada año un millón de jóvenes latinos nacidos en Estados Unidos, que ya son ciudadanos, entra a la fuerza laboral… De hecho, somos la salvación de la fuerza laboral de Estados Unidos.
Pero, cómo o qué es lo que define al Producto Interno Bruto, quién define estas maneras de medir la riqueza de una nación, un estado, un nuncio o condado. A qué banco de datos acuden los investigadores del estudio, y si este es confiable, o con qué metodología se realiza la investigación son otras de las explicaciones que brinda el Dr. Hayes-Bautista en este programa que aquí se reseña:
Trabajadores de la industria de la leche temen las amenazad de deportación de la administración Trump. Foto: USA Today.
Como se desglosan estos datos y qué implicaciones tienen para la vida de los latinos el ser un importante motor de la economía estadunidense y mundial si paradójicamente tienen los índices más altos de pobreza, sufren la discriminación y el abuso en la fuente de trabajo, los más bajos salarios etcétera, además de ser un importante sector del consumo de bienes inmuebles y del resto de los productos y servicios comerciales, incluida la educación y la salud.
De estos y otros detalles del estudio nos habla en el enlace de abajo el Dr. Hayes-Bautista, que de paso mantiene un interesante diálogo con los radioescuchas de Línea Abierta:
