La expansión del programa de salud para los pobres, el Medicaid es una oportunidad para asegurar a millones de personas que en este país no pueden pagar la facturas de hospitales, medicinas y atención médica. En Nueva York, tras ser diagnosticada de cáncer, Jenny Paredes perdió el trabajo y su seguro médico, y pronto se encontró hundida en una enorme deuda por las costosas visitas a salas de emergencia, ambulancias y hospitales. Ahora, por fin, recibió la ayuda del Medicaid. Marco Vinicio González tiene más detalles desde Nueva York.
Jenny Paredes estudiaba y trabajaba en la universidad pública de la ciudad de Nueva York, City College, cuando fue diagnosticada con cáncer cervical. Tuvo que ir dos veces a la sala de emergencias (E.R.) del hospital de la Universidad de Columbia, donde hay personal médico especializado y la tecnología adecuada para tratar su enfermedad.
Tras perder el seguro médico con el que contaba Jenny en ese momento, que de todas maneras no le cubría estas visitas, e terminó con un facturas por estos servicios altísimas.
“Entonces el Hospital de Columbia University, pues teniendo en cuenta que les debía dinero, por asistir a urgencias dos veces, ellos te tramitan el proceso para que te den Medicaid, de una manera más fácil y más sencilla que navegar el sistema…”.
Pero los costos le parecen súper inflados a Jenny:
Jenny y Camilo, su esposo
“De hecho sumé mis cuentas y ascendía a 11 mil 220 dólares por dos visitas al E.R”
Sobre todo porque ella está familiarizada con el mundo de la medicina.
“Pues ya que yo estoy en el medical field, o tengo noción de los precios, es una cosa absurda. O sea, un cuadro hematológico que en Colombia, en una clínica privada vale 50 dólares cuando mucho, aquí costó mil 300 dólares….»
En tanto, el peso de estas exorbitantes facturas atentó contra su salud mental, dice Jenny:
“O sea, mis ataques de ansiedad eran tan escalados que yo opté por no abrir los sobres de las facturas… O sea mi salud mental se veía comprometida por ver las facturas… psicológicamente es demasiado. No puedes manejarlo, realmente”
Tras la decisión de la Suprema Corte que en junio de 2012 dio libertad a los estados para expandir el Medicaid, Nueva York fue uno de los primeros estados en implementar de inmediato su expansión al Medicaid, para brindar cuidado médico a un millón de desasegurados. La mitad de los estados del país ha hecho lo mismo, aunque con diferencias en la forma de implementar el programa federal.
La nueva ley de salud toma poco más de 18 mil millones de dólares de su presupuesto para pagos excesivos a hospitales, y los transfiere al Medicaid. Cerca de la mitad de los estados del país han expandido el Medicaid bajo la ley de salud. Al implementar la expansión en Nueva York, el estado podrá brindar atención médica a un millón más de desasegurados. Jenny es una de las que se benefició de la expansión.
Cuando la enfermedad se volvió aún más agresiva, ella no pudo trabajar más, perdió el empleo y le avisó a la trabajadora social del hospital.
“Entonces yo simplemente llevé mis documentos a la oficina…, ella hizo la aplicación por mi, ella conectó las cuentas pendientes que tenía en el Columbia con Medicaid, yo sólo tuve que llevar mis documentos una vez y ya”
Antes de la expansión del Medicaid en Nueva York, aún sin trabajo, Jenny no hubiera sido elegible al Medicaid, porque los ingresos de su esposo sobrepasaban el límite de elegibilidad impuesto por el Medicaid anteriormente. Pero con la expansión de este programa Jenny pudo calificar.
El Dr. Jaime Torres, Director Regional del Departamento de Salud y Servicios Humanos en Nueva York, Nueva Jersey y Puerto Rico, dijo en el programa de Línea Abierta que la Expansión del Medicaid permite que un individuo con ingresos económicos hasta de 15 mil dólares anuales sea elegible:
“Y esto es muy importante, porque muchas de nuestras familias trabajadoras son las que se van a beneficiar de esta expansión del Medicaid. Por ejemplo, en el estado de Nueva Jersey, anteriormente lo máximo que podría hacer en ingresos económicos eran cinco mil dólares para ser elegible”
Jenny afirma que la alegría la invadió cuando supo que tenía finalmente el Medicaid:
“No, es como un milagro. Ese día, como que se te ilumina la vida, saber que no debes tanto dinero, y yo estoy en proceso aún de recuperarme. Necesito controles todavía. Voy casi una vez al mes al médico. Entonces, te cambia la vida. O sea, tu calidad de vida cambia sustancialmente»
Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, reportó desde NY, Marco Vinicio González.
