De la redacción
Los votantes de La Florida decidirán el próximo martes sobre la Enmienda 4, parte de una reforma constitucional que de ser aprobada permitiría restituir el derecho a votar de una mayoría de personas convictas por un delito, con excepción de ofensores sexuales, violadores y asesinos que incluso han completado sus sentencias, quienes no serían elegibles. En La Florida todavía se puede votar por anticipado hasta el 3 noviembre y hasta el mismo día de la elección puede votar mostrando una identificación con fotografía. Esta nota forma parte de nuestra serie Hacia el voto 2018 / Sistema de Justicia Criminal.
Actualmente Estados Unidos tiene la mayor población cumpliendo una pena en prisión: 2.2 millones de presos, o 698 por cada 100 mil habitantes. Los latinos en cárceles de estados Unidos alcanzaban en 2017 un promedio de mil 238 personas presas por cada 100 mil habitantes, mientras que el promedio de la población blanca fue de 478, y el de los afroestadunidenses fue de 3 mil 23.
Los investigadores afirman que la explosión de la población carcelaria estuvo acompañada por el incremento y severidad de las penas, especialmente en los últimos 20 años, cuando el gobierno federal y algunos estados buscaron reprimir a como diera lugar el tráfico y consumo de drogas. Es decir, «cortesía» de la Guerra contra las Drogas. De tal suerte que el promedio de penas para delitos menores, que antes era de uno a dos años, se incrementó a 5,10 y eventualmente hasta 20 años.
La Florida es un estado con unas 100 mil personas actualmente encarceladas, que han perdido su derecho a votar. Además, las cárceles de La Florida se hallan entre las peores de Estados Unidos, según un estudio del Proyecto de Justicia Responsable de la Universidad estatal de La Florida.
El comité que patrocina la Enmienda 4 o de restitución de los derechos del voto para los delincuentes convictos que han pagado sus sentencias, declaró: «Los estadunidenses creen en las segundas oportunidades. Necesitamos asegurarnos de que la Ley de La Florida también lo haga”.
Hasta el verano de 2017 existían en La Florida 1.5 millones de personas que están excluidas de votar de forma permanente debido a una condena por haber cometido un delito anterior, liderando a la nación en este rubro de la justicia penal. Y a partir de 2018 La Florida se convirtió en uno de los cuatro estados del país que todavía tiene un sistema que excluye a tantas personas de votar, o donde los delincuentes condenados no recuperan este derecho a votar hasta que una Junta estatal de Clemencia Ejecutiva lo restituya. Los otros tres estados son Iowa, Kentucky y Virginia.
Como se sabe, los derechos del voto para los delincuentes convictos varían de estado a estado. En la mayoría de los estados dichos delincuentes no pueden votar mientras están encarcelados, pero pueden recuperar su derecho al voto después de ser liberados de la prisión, o en algún momento posterior.
La Junta de Clemencia Ejecutiva de La Florida había restaurado automáticamente los derechos de los delincuentes que completaran sus sentencias y pagaran una restitución, siempre y cuando no tuvieran cargos penales pendientes. Pero el actual gobernador republicano, Rick Scott eliminó esas reformas de la administración previa a su mandato. Ahora los delincuentes condenados deben esperar cinco o siete años, dependiendo del tipo del delito cometido, después de completar sus condenas para solicitar entonces que la junta considere la restauración de su derecho al voto y otros derechos civiles.
Según la ley vigente la Junta de Clemencia Ejecutiva de La Florida se reúne cuatro veces al año para revisar las apelaciones de clemencia, a fin de restablecer el derecho al voto de los ex prisioneros. Más de 20 mil floridanos están actualmente en la lista de espera para esa revisión, lo que ocurre después de un período de cinco años de espera para ser elegible, dice la publicación independiente, Newsmax.
En tanto, un número creciente de conservadores advierte a los votantes republicanos de La Florida sobre un presunto peligro que encarna la Enmienda 4 en la boleta electoral. En el fondo encubren el temor de los republicanos de perder las elecciones del 2020 en La Florida, dice la fuente.
Si se aprueba la Enmienda 4, a partir de 2018 La Florida se convertiría en otro de los 19 estados que restablecen el derecho del voto después de la prisión, cuando se completa la libertad condicional.
Un informe de The Sentencing Project estimó que, a partir de 2016 alrededor de 6.1 millones de personas, o aproximadamente el 2.5 por ciento de la población en edad de votar en Estados Unidos fueron privados de sus derechos al voto debido a una condena por delito grave. Se estimó entonces que La Florida tenía 1 millón 686 mil 318 personas, o el 10.43% de la población estatal en edad de votar, marginados de este derecho debido a delitos mayores.
Estos son familiares, amigos y vecinos que ya han pagado sus deudas a la sociedad. Ahora es el momento de restaurar la capacidad de votar para los floridanos que han ganado esta oportunidad de participar y retribuir a sus comunidades, dice Floridians for a Fair Democracy, que está liderando la campaña en apoyo a la iniciativa.
Las últimas encuestas sugieren que la votación sobre la Enmienda 4 está demasiado cerca de un triunfo en las urnas. La encuesta de St. Pete Polls, realizada a principios de esta semana encontró que entre los votantes que ya habían votado, alrededor del 63% estaban a favor de la Enmienda 4. Y entre los que aún no han votado, sólo un 57% está a favor, por debajo del 60% requerido para enmendar la constitución del estado. Y a poco menos de una semana para la elección, la encuesta reveló además que aproximadamente el 8% de los votantes de La Florida siguen indecisos■