Partidarios de Obamacare recurren al tribunal superior en busca de ayuda para evitar que los republicanos y Trump pongan fin a la ley vigente de salud. Foto: https://qz.com.

De la redacción

Como se sabe, muchos estadunidenses que sobreviven al coronavirus, en particular nativo y afroestadunidenses, así como latinos, suelen sufrir problemas de salud subyacentes, que las compañías aseguradoras consideran problemas de salud preexistentes, para rechazar la venta de un seguro médico o venderlo a precios exorbitantes. Por eso resulta incomprensible que la administracion Trump haya slicitado a la Suprema Corte la derogación de la Ley de Cuidados de Salud Costeable (ACA), conocida tambien como Obamacare.

Los latinos, junto con otras de las minorías padecen altas tasas de diabetes, asma y presión arterial, entre otros padecimientos. Lo que no sólo los hace blanco fácil de las compañías de seguro, sino que también los vuelven más vulnerables al coronavirus.

Y ahora que como se sabe la pandemia de Covid-19 ha alcanzado en Estados Unidos el umbral de las 50 mil hospitalizaciones diarias, y que cuenta con la mitad de los casos de infección de todo el mundo, la administración Trump está redoblando esfuerzos para revertir las protecciones de la era Obama que evitan a las compañías de seguros de salud rechazar o penalizar a las personas con tales condiciones de salud preexistentes, a la hora de querer comprar un seguro médico.

De ahí que resulte no solamente absurdo sino cruel que la administración Trump haya solicitado a la Suprema Corte de Justicia que derogue la totalidad del Obamacare.

Si la demanda de Trump es exitosa, se elevará el número de desasegurados, actualmente 30.4 millones a 50.3 millones de estadunidenses. Esto representa un aumento del 65 por ciento en la tasa de personas sin seguro. Y a medida que aumenta esta tasa, también lo hará la cantidad de atención no compensada, que crecerá en al menos un 82% de acuerdo con datos del Urban Institue.

De esta suerte, millones de estadunidenses verán un aumento en las primas de sus seguros; se pondrá fin a las protecciones para las personas con afecciones preexistentes; se pondrá a las compañías de seguros nuevamente a cargo de la atención médica, y se obligará a las personas mayores a pagar más por los medicamentos recetados.

El resultado será, como lo admitió la propia administración Trump en un tribunal federal, desatar el «caos» en todo el sistema de atención médica.

En otras palabras, si Trump se sale con la suya, para comenzar 23 millones de personas en Estados Unidos se quedarían sin seguro de salud, así como 135 millones de estadunidenses que tienen afecciones preexistentes.

Van aquí algunas consecuencias si la Corte Suprema deroga el Obamacare:

• Terminaría con el Medicaid en los estados que optaron por expandir este programa: Alaska, Indiana, Luisiana, Pennsylvania, Michigan, Montana y New Hampshire.
• S acabarán las protecciones de este seguro de salud administrado por los estados, que cubre a 17 millones de personas de bajos ingresos, incluidos muchos con necesidades de atención médica complejas y costosas
  O sea, adultos jóvenes y mayores, niños, mujeres embarazadas y personas con discapacidad.
• Se pondrá fin a este seguro que cubre a 1 de cada 5 estadunidenses, y que es la principal fuente de cobertura de atención a largo plazo para los estadunidenses de bajos ingresos.
• Casi 12 millones de personas mayores tendrán que pagar más por los medicamentos recetados porque se reabrirá el «período sin cobertura» del Medicare.
• 2.3 millones de hijos adultos ya no podrán permanecer en el seguro de sus padres, como ahora lo establece todavía Obamacare, para los jóvenes hasta los 26 años de edad.
• Las compañías de seguros podrán cobrar a las mujeres un 50% ciento más que a los hombres.
• Acabaría con la asistencia financiera que ayuda a 9 millones de personas a comprar atención médica en el mercado de seguros (Obamacare).
• Y también terminaría con un poyo clave para hospitales rurales. A medida que los estadunidenses pierden la cobertura, los hospitales que ya tienen dificultades se verán aún más afectados y verán también elevar sus costos de operación.
• Y se dará marcha atrás los requisitos para que las compañías de seguros cubran medicamentos recetados y atención de maternidad■