Cientos de manifestantes marchan en apoyo a la comunidad LGBTQ tras la masacre fatal en ub club nocturno gay. Foto: Cortesía de Sandra Sellars.
Dando un paso histórico, el presidente Biden firmó la ley que protege los derechos de los matrimonios entre personas del mismo sexo e interraciales. La ley blinda en el orden federal estos matrimonios contra cambios previsibles de la mayoría conservadora en la Corte Suprema. Además, prohíbe que se discrimine a quienes se casen con personas del mismo sexo. Esto sucede en momentos en que la comunidad LGBTQ se recupera del trauma de una masacre en un club nocturno del estado de Colorado, considerada un crimen de odio. Mayra Hidalgo Salazar (MH), subdirectora del Grupo de Trabajo Nacional LGBTQ platica aquí con Chelis López (CL) sobre la trascendental legislación.
CL:¿Qué significa esta ley para las personas que ya están casadas pero viven actualmente en estados que prohíben el matrimonio LGBTQ
MH: Lo que significa es que si ellos se casaron en un estado que reconocen el matrimonio igualitario, aunque viven en un estado que no lo reconoce, eso realmente protege sus derecho como parea LGBTQ. Y es sumamente importante, ¿verdad?, porque algunas personas cuando piensan que el matrimonio igualitario, se limitan a pensar, ‘Oh, qué significa eso para mi religión’, para su institución religiosa. Pero la verdad es que los derechos en la vida cotidiana en una pareja son sumamente importantes. Por ejemplo, cuando va a ver a su pareja en un hospital, cuando su pareja haya fallecido, tener ese derecho civil como su pareja, legalmente reconocido a nivel federal, simplemente puede ser la diferencia en la autonomía que tienen las parejas en Estados Unidos. Y pues es un logro bien importante, especialmente para las parejas que están viviendo en estado que prohíben el matrimonio igualitario. Y también, estamos viviendo en un contexto en que la retórica anti-LGBTQ ha crecido, y a la misma vez estamos contando con más del 71 por ciento de apoyo por parte de la opinión pública hacia el matrimonio igualitario y pues estamos bien emocionados de que el Congreso haya tomado el lado de la mayoría de los estados en Estados Unidos y que estamos haciendo progreso en ese sentido.
CL: ¿Cuál se espera, Mayra, que sea el impacto específico de la ley del matrimonio entre parejas del mismo sexo, y en sus familias? ¿Cuáles son esos grandes beneficios que eso implica?
MH: El matrimonio en Estados Unidos, en el sentido legal, realmente es un contrato financiero y un contrato legal. Los beneficios en los impuestos, los beneficios económicos, porque ya estamos viviendo en una situación económica donde un hogar no puede sobrevivir con solamente un sueldo. Y para las personas LGBTQ el matrimonio también ayuda a crecer nuestros hogares financieramente, también como ayuda a las parejas heterosexuales, ¿verdad?
CL: Mayra, la ley gano el apoyo de muchos republicanos, después de que hubo una enmienda que garantiza que grupos religiosos sin fines de lucro no estén obligados a realizar matrimonios entre personas del mismo sexo. ¿Puedes exlicarnos?
MH: Nadie va a obligar a las iglesias a casar a las personas LGBTQ. Cuando estamos hablando del matrimonio igualitario estamos hablando de un derecho civil que todos merecemos tener en este país. Y, que las personas LGBTQ mereceos tener en nuestras comunidades. Esa enmiendo es muy importante de subrayar porque realmente no tiene la intensión de imponer nuestras creencias; sino realmente tiene la intensión de otorgarles los derechos a las personas LGBTQ, que todos en este país ya tienen. El acto de respetar el matrimonio sí es un logro muy grande para nuestra comunidad, para este país, y todavía hay mucho trabajo qué hacer. En las personas LGBTQ todavía estamos enfrentando discriminación en la vida cotidiana en este país. Es algo que necesitamos cambiar, y también que no se olviden de tener estas conversaciones con sus familias, con sus tías, con sus tíos, para realmente cambiar sus corazones y sus maneras de pensar. Porque solamente así vamos a iniciar el cambio, no solamente políticamente pero que empiece también en nuestros hogares•
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