La mayoría de los estados rebasaron las metas que tenían previstas para la inscripción en los planes de seguros de salud bajo Obamacare. Tras el cierre de sus inscripciones el 31 de  marzo, el número de personas sin seguro médico disminuyó por millones. Sin embargo, no así el número de latinos que se inscribieron en esos planes de seguro, pues continúa siendo demasiado bajo. ¿Cuáles son los obstáculos que impiden a las familias latinas la compra de un seguro de salud? ¿Qué hace la administración Obama para mejorar el sistema? Ante estas preguntas y premisas Línea Abierta echa una mirada crítica a la experiencia de inscripción a un seguro médico por parte de los latinos, y en esta segunda parte de la reseña la radio audiencia de Radio Bilingüe expresa los obstáculos que tuvo que sortear en el camino y las dudas que persisten aun sobre los alcances de Obamacare.

Como decía la Dra. Jane Delgado, se desconoce cuántos latinos han quedado inscritos ahora como nuevos usuarios de la Ley de Salud Costeable, y cuántos se han inscrito a un programa nuevo o tenían seguro antes y cambiaron. “Hasta febrero –dice Delgado en la pasada entrega- la página web en español no funcionaba… ¡y eso es un problema grave!”.

Precisamente Álvaro, de Merced, California llama en este momento que se abren los micrófonos de Línea Abierta para ilustrar este problema, que como vemos al parecer prevalece todavía:

“Llamaba para saber si sí aceptan la aseguranza, cuando se cambia uno al Obamacare. Porque yo fui al doctor, y no la están aceptando. Te dicen: ‘Oh, no estamos aceptando nuevos pacientes’. Entonces uno va con sus niños -yo tengo niños-, anda navegando, y al final de cuentas, ¿sabes lo que hace uno, Samuel? Va uno y paga de su bolsillo. Qué, ¿cuánto me cuesta esto? OK, ponlo aquí en mi tarjeta, toma, págalo… Es una lástima. Tengo una niña que ocupa lentes, y nadie le acepta la aseguranza… o los dientes, ¡6 meses! ‘Que llámanos en julio…, llámanos en agosto… ”.

Ante el asunto de las limitaciones, a la hora de contar con las redes de doctores que los distintos proveedores ponen a la disposición de los usuarios, la Dra. Delgado sostiene que esa es la realidad en el país:

“Hay personas que han comprado el seguro médico pero cuando van a usarlo encuentran que no tienen la cobertura… Muchas personas no comprendían que tienen que gastar hasta un punto determinado, y es entonces hasta cuando el seguro va a cubrir”, sostiene delgado, refiriéndose a los deducibles o co-pagos. “Y yo digo, ¿co-pagos?… La palabra debe ser: ¡Tú pagas! Porque esa es la realidad, la persona paga, y eso es lo que se necesita saber”.

La Dra. Delgado afirma que Enrrol America recibió tres millones de dólares de la Fundación Robert Wood Johnson y otras, para dar información a la gente. “Nosotros –Alianza- le dijimos al gobierno que por favor ayude a la gente de la comunidad; a las clínicas, las organizaciones, para que puedan tener más navegadores. Porque las personas no sólo necesitan comprar, sino en realidad saber lo que están comprando, y qué beneficios van a tener”. Delgado añade que muchas personas piensan que el seguro de salud va a tener cobertura para muchas cosas, y no es así, afirma.

Orozco señala que existen estas y otras limitaciones, y que al salir a la búsqueda de un proveedor, como en el caso de los PPO’s (Preferred Provider Organization/Organizaciones de Proveedores Preferidas), estos dependen de redes de médicos y servicios muchas veces bastante reducidas.

La Dra. Delgado está de acuerdo, y agrega que esta situación se da también respecto a las medicinas. Señala que si bien es cierto que las compañías no pueden negar cobertura a personas con enfermedades preexistentes, bajo la Ley de Salud Costeable, “algunas de las compañías han dicho que no van a cubrir algunas medicinas; y esas medicinas son para las condiciones médicas que no pueden discriminar contra la persona, porque éstas la tienen, pero si con las medicinas”. Por eso, dice la Dra., es tan importante revisar los detalles de las pólizas. “Y esos detalles son difíciles de encontrar; nosotros estimamos que para cualquier persona que se hace parte de un seguro se demora lo mínimo dos horas para escoger un plan y saber lo que ese plan incluye”.

Miguel llama de Corcora, California: “Creo que el lanzamiento de Obamacare fue un rotundo…, a la mejor un éxito para el Presidente, pero… tiene que mejorarlo; ¿por qué? Pues porque, a veces no piensan en la clase media. Hay tantas oportunidades para los pobres, pero dejan a la clase media sin amparo. Porque a veces el pobre hasta tiene financiamiento, como en educación…”.

Pero, ¿de qué manera en particular le afecta Obamcare a personas como Miguel?

“Mire, yo gano como 40 mil dólares anuales, para mi, mi esposa y mi hija. Mi hija agarró Medical, pero nosotros vamos a pagar casi 400 dólares al mes; entonces, ya no voy a poder hacer cosas, como invertir en mi casa, comprar un carro, una televisión… tienen que mejorar, tienen que incentivar más a la clase media…”.

Wilfredo habla desde Santa Rosa (CA): “Yo estoy de acuerdo con el que acaba de dar su comentario (Miguel), porque yo también he tenido mi experiencia y no estoy de acuerdo, está muy mala (la atención a la salud). Yo me inscribí en el Obamacare, y me hablaron de Bronce, me hablaron de Platino, de Plata y me hablaron de Oro. La de bronce me dijeron qué pasaba…, y agarré entonces la de platino. Estoy pagando más de 500 dólares por mes, y cuando fui a un examen físico al hospital Kaiser de aquí de California, fue una sorpresa muy grande, me pasó el médico y dijo:

-Wilfredo, ¿cómo estás?

-Pos aquí nomás, doctor, visitándolo para un examen físico.

“Me habían dado una hoja que decía Cero, que no costaba nada; que tenía derecho a dos exámenes por año. Cuando me hice el físico al doctor le comenté de que también me estaba molestando una uña, y me dijo: ‘Yo te puedo ayudar, no tengas pena, bla, bla, bla…’. Y a la hora que me llegó el cobro, me llegó por 180 dólares más, que tenía que pagar por mes. Y pagando 500 dólares por el mes, más 180, son casi 700 dólares…”.

Wilfredo envía un mensaje a la radio audiencia: “Muchas personas tienen que pensar si quiere entrar (a Obamacare), porque es más fácil pagar una multa, de su salario al año, que va a salir más barato que entrar a una aseguranza que no es cierta”.

De Riverdale llama Juvenal: “Horita parece que nos tienen como cuando hay una fiesta de niños y que van a quebrar la piñata y le amarran a uno los ojos y le dan vueltas, y no sabe uno ni para dónde quedó la bolita. Y es que me inscribí yo a mediados del mes de marzo, y no me supieron decir ahí para cuál programa calificaba yo; para agarrar toda la información me tardé yo con ellos como dos horas, y no me pudieron dar una respuesta… Todavía me llegó una carta el 16 de abril pasado, y yo me junté con ellos por allá. Y me dijeron que yo me había quedado fuera que porque ya era un día después del día 15. ¿Pero cómo me voy a quedar fuera? Y ahora debo esperar hasta octubre para que vuelva yo a aplicar”.

A esas inquietudes la Dra. Delgado responde que en relación al señor que aboga por la clase media, la manera como se calculó la ayuda fue difícil, y que se trató de reducir el costo de las primas lo más que se pudo, pero que sin embargo todavía para muchas personas no fue suficiente. “Eso lo sabemos, y tratamos de trabajar con las compañías para que nos ayuden a tener más cobertura para más personas. En cuanto al segundo señor, sólo algunas cosas están cubiertas bajo de lo que uno puede incluir en prevención. Por eso digo que los detalles son importantes, y no los comunicaron bien a la gente cuando estaban inscribiéndose”.

Delgado sostiene que hasta las personas que han tenido seguro de salud durante muchísimos años, “muchas veces cuando va al médico quedan sorprendidos al descubrir lo que está cubierto bajo el seguro y lo que no. Eso es algo que la conversación tiene que cambiar, y tenemos que informarle más a las personas”.

En cuanto a Wilfredo, Delgado pide que se comunique al 866 783 2645 y que pida la asistencia que se merece. “Mire, la multa es pequeña, comparada a si usted tiene una enfermedad grave, o tiene un accidente, o algo así; por lo que le pedimos a las personas que por favor obtengan un seguro de salud, para su vida, para su familia”.

El proceso de la inscripción latina a las nóminas de Obamacare, con excepción de Texas, dejó estas y otras experiencias con similares dificultados, de las que se desprenden algunas recomendaciones que Alianza hace a la actual administración, de cara al próximo periodo de inscripción abierta para el ciclo 2014-2015 en noviembre.

“Primero, necesitamos más navegadores”, dice la Dra. Jane Delgado. “Segundo, necesitamos tener una tecnología que funciona, sin los problemas que tuvimos. Tercero, necesitamos comenzar a trabajar ahora, para que las personas sepan de los planes de salud (Bronce, Plata, Oro, Platino), y qué significan cada uno”.

La doctora recomienda conocer mejor las modalidades de cada plan, porque por ejemplo el plan  de plata, aunque cuesta un poco más que el de Bronce al mes, es mejor. Pues el deducible del de Bronce es más caro que el de Plata, Oro o Platino. Hay que tomar en cuenta también el factor de los co-pagos. Si uno tiene un plan con pólizas mensuales bajas, pero cada visita al doctor hay que pagar una cuota alta, esto funcionaría para una persona que visita poco al médico. Pero una persona con un padecimiento crónico, por ejemplo, que requiere visitar a su doctor con mayor frecuencia le conviene pagar una póliza mensual alta, pero con co-pagos más baratos; y estos detalles tienen que ser bien explicados antes de inducir a una persona a comprar un seguro, Por eso la Dra. Delgado insiste en que “tenemos que empezar de verdad esta conversación ahora, ayudar a nuestra gente; tú sabes, una de las cosas que se dicen es que si se hace la solicitud en el mercado de seguros, necesitas comprobar quién tú eres, y muchas de las personas no tenían la información. Si tomas medicina saber cuál es la medicina que necesitas, y también saber qué cosas espera uno para su vida; si va a tener más hijos, si necesita un plan familiar y cosas así”.

Todas estas cosas, reitera Delgado, se tienen que estar pensando desde ahora, para que cuando comience de nuevo el periodo de inscripción abierta en noviembre estar preparados, saber lo que se necesita.

En noviembre, aclara Orozco, personas como Wilfredo, que se inscribieron en un plan de Platino, podrá reconsiderar su plan si así lo deciden, y elegir otro plan para cambiarse, pero a partir de noviembre.

Lo que hace complicado este proceso dice Delgado, “es que cada estado hizo las cosas de manera un poco diferente, así que muchas veces, cuando damos información tenemos que saber el estado donde viven las personas, si uno fuma o no, cuántos niños hay en la familia, si hay miembros de la familia que no están aquí legalmente, lo que uno puede hacer y cosas así”.

Y en tanto que cada caso es único, es por eso que se necesita tener la información correcta: “Tener los navegadores locales que te den la información detallada, específica a ese estado y personalmente, cara a cara”, insiste Delgado.

David llama desde Yakima, Washington para hacer un comentario: “Cuando se hablaba de Obamacare, que se hablaba de un seguro universal, yo me imaginaba un seguro para todos, sin importar la clase social, ni nada; pero ahora me salen con planes, que un plan para estos, un plan para lo otro… ¡Están dividiendo las clases! Y cuando se trata de la salud, debería ser un derecho universal para todos, ¿verdad? Porque cuando uno se enferma, no debería haber un plan; que si te enfermaste de esto, no te cubre porque no tienes ese plan. Si te enfermaste de aquello, no te cubre… O si tienes un accidente de carro, te dicen, ‘No, mándeselo a tu seguro del carro’. Entonces estamos sobreasegurados en cierto sentido. Ahora, unas personas toman, fuman, usan mariguana, cocaína, usan de todas drogas… son enfermedades que se pueden prevenir. ¿Por qué yo tengo que pagar lo mismo en este plan, que una persona que le gustan todos estos vicios?”.

Orozco nos recuerda que efectivamente el debate sobre el seguro comenzó como una conversación sobre la necesidad de un seguro universal a nivel federal, pero a final de cuentas y sobre la marcha hubo de hacerse algunos compromisos, a fin de que la ley pudiera pasar. A niveles estatales existen algunos esfuerzos por lograr que en los estados este tipo de seguro que Juvenal propone, el seguro universal llegue a prosperar. Pero acotó que no es el caso de California, donde existe un anteproyecto de ley encaminado a ofrecer seguro de salud para todos.

Este plan de seguro que del presidente Obama, es solamente un paso hacia el seguro de salud universal en este país, sostiene la Dra. Delgado. “Esperamos mucho más en el futuro, nuestra gente trabaja fuerte en este país y necesitamos tener un seguro de salud; y yo espero que en el futuro todo mundo pueda tener seguro de salud”, concluyó.