La administración Trump decidió anular estándares nacionales que obligan a la industria automotriz a fabricar autos más limpios, alegando que dichas reglas son una carga para los fabricantes de carros. Por acuerdo gestionado durante el gobierno de Obama, la industria automotriz se comprometió con California y 12 estados más, a fabricar autos que rindan hasta 55 millas por galón a más tardar para el 2025. Al trascender que la autoridad federal del medio ambiente (EPA) da marcha atrás en estos compromisos, los tres estados de la costa oeste y docenas de ciudades manifiestan su oposición y se van a los tribunales. Alberto Ayala (AA), director ejecutivo de la autoridad que vigila la calidad del aire en la zona metropolitana de Sacramento, capital de California, habló de esto con Samuel Orozco (SO), director de Noticias de Radio Bilingüe, en el programa de Línea Abierta.
A continuación reproducimos un fragmento de la plática:
SO: Alberto, explíquenos, denos los detalles de la controversial decisión de la autoridad federal del medio ambiente por acabar con el estándar acorado en la pasada administración pro carros limpios. Denos más detalles.
AA: Yo creo que lo principal es que quede claro que la misma agencia, la EPA, determinó ya hace más de un año, que la evidencia era clara de que la industria automotriz ya iba en camino para cumplir con los requerimientos federales de manera factible. Y en sí, como tú lo has dicho, que la industria está trayendo al mercado los vehículos que ampliamente cumplen con los estándares, que son más limpios, que generan mejor eficiencia que beneficia al consumidor. Entonces, desafortunadamente la decisión que el señor (Scott) Pruitt ha tomado, una decisión enteramente política; no existe la evidencia ni técnica ni científica que diga que las emisiones de los vehículos no se pueden cumplir. Entonces, por esa razón muchas agencias, como la que yo represento hemos alzado nuestras voces, para tratar de proteger el medio ambiente, proteger la calidad del aire del planeta, y también para hablar por los consumidores. Porque obviamente los vehículos que el señor Pruitt quiere van a ser de menos eficiencia, lo que quiere decir que todo consumidor que maneja va a pagar más por el costo de la gasolina, por la más baja eficiencia de esos vehículos. Es claro para nosotros que la administración federal, el señor Pruitt y el presidente están queriendo darle el beneficio a las compañías de petróleo, a las compañías de los autos y no a los consumidores.
SO: ¿Qué pasos tienen que dar la EPA para conseguir esa eliminación de las reglas?
AA: Lo que la EPA anunció al principio de este mes fue la determinación de oficial, pro el señor Pruitt, de que no estaban de acuerdo con las reglas que ya se habían adoptado; son las mismas reglas que se habían adoptado ya en el año 2012 aquí en California, y en el conjunto de los otros estados que siguen las reglas de California. Entonces el señor Pruitt dijo que no estaba de acuerdo, creía que las reglas no eran adecuadas; pero todavía no nos ha dicho, están en proceso ahora de presumiblemente diseñar nuevos requerimientos, nuevos estándares, y pues…, estamos todos esperando qué van a proponer. Obviamente se espera que lo que va a hacer el señor Pruitt es relajar los requerimientos, darle la ventaja a las compañías automotrices y a las compañías del petróleo, y poner unos estándares que sean menos restringidos; que no le beneficien al consumidor. Eso es lo que se espera, dentro de unos cuantos meses, un año cuando mucho■