Adriana Ramírez del Comité de Padres y Madres. Foto: Vladimir Flores.
Desde hace más de un mes, miles de maestros en el estado de Oaxaca, México mantienen una huelga para protestar la reforma educativa que tramita por la via rapida el gobierno federal. La reforma haría más fácil despedir a los maestros y podría abolir el sistema de las escuelas normales para prepararlos. Esta semana, un violento operativo policiaco contra los maestros en desacuerdo dejó once muertos y un centenar de heridos. La represión policiaca ha provocado condenas internacionales y más protestas en otros estados del país. Vladimir Flores reporta desde Oaxaca.
El domingo pasado, las autoridades mexicanas intentaban liberar las carreteras bloqueadas por el sindicato de los maestros en Oaxaca, pero enfrentaron una feroz resistencia en la ciudad mixteca de Nochixtlán, donde con barricadas, piedras y automóviles quemados, cientos de pobladores resistieron, mostrando su apoyo a los maestros.
Restos de una barricada en el centro de Oaxaca. Foto: Vladimir Flores.
La Comisión Nacional de Seguridad del gobierno mexicano aseguró que la policía no utilizó armas de fuego. Inmediatamente su credibilidad fue cuestionada, porque videos y fotografías de diversos medios de comunicación muestran a los policías disparando con rifles y pistolas contra los manifestantes. Según los reportes de las organizaciones civiles, tan solo en Nochixtlán murieron diez personas por disparo de arma de fuego. Una más perdió la vida en Viguera, en la entrada a Oaxaca.
Después de ser cuestionado, el comisionado general de la Policía Federal, Enrique Galindo argumentó en conferencia de prensa que en Nochixtlán los manifestantes tambien dispararon.
«Aquí hay armas de fuego, aquí ya no es un asunto de bloqueos, de manifestación’ aquí ya se están cometiendo delitos. Aquí hay gente con armas, aquí es otra cosa. Efectivamente al final, muy al final, del proceso llegó un grupo de la policía federal que portaba sus armas de cargo», dijo Galindo.
Pero los defensores de derechos humanos tienen otra opinión.
El museo de los pintores en Oaxaca. Foto: Vladimir Flores.
«Esa información es imprecisa, es inexacta y no corresponde con la realidad de los hechos», dijo Isaac Torres, presidente de la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos. «Lo único que buscan es confundir el sano juicio, el criterio justo de la opinión pública para justificar o seguir justificando el emplazamiento de las fuerzas armadas en territorio oaxaqueño».
La violencia provocó marchas y protestas en Oaxaca, y en otras ciudades de México y el mundo. Isabel García representa la sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.
«También en varios estados de la república mexicana hay voces, han salido a las calles y por supuesto que estamos en paro. Aquí, ningún maestro debe estar trabajando», dijo García.
Gente leyendo los periódicos. Foto: Vladimir Flores.
Aquí, la respuesta del gobierno trajo a la memoria el paro de los maestros del año 2006 que terminó con decenas de muertos y una estela de impunidad que hasta la fecha no se resuelve.
Desde el 19 de junio la señal de radio de la Universidad Autónoma de Oaxaca fue tomada por activistas para convertirla en una más de las herramientas del movimiento social.
«(…) y de verdad, maestros : no se rindan, no están solos, adelante, la lucha tiene que triunfar – muchas gracias compañera y seguimos para informarles lo que sucede (…) felicito al pueblo que se ha levantado en lucha contra esos rufianes (…)»
Un grupo de artistas en Oaxaca también convocó a protestar.
«Escuchábamos helicopteros y las radios comunitarias, nos generó un ánimo de desesperación», dijo Ruth Orozco, gestora cultural quien participó en un festival organizado un día después de los hechos de Nochixtlán. «Cuando el magisterio ha extendido la mano del diálogo el gobierno lo que ha dado son toletes, gases lacrimógenos y muerte. Como gremio cultural tenemos que estar organizados de alguna forma para hacerle frente a esta situación.»
Marcha en el Zócalo. Foto: Vladimir Flores.
Dos altos funcionarios del gobierno estatal renunciaron para protestar por la represión. El pasado miércoles comenzaron los primeros diálogos entre representantes de los maestros y la Secretaría de Gobernación y continuarán la próxima semana.
Pero mientras tanto, siguen miles de escuelas cerradas y carreteras bloqueadas, a unos días de comenzar el evento turístico más importante de este estado, la Guelaguetza, que podría traer la atención de muchas más personas a la protesta de los maestros, y la respuesta violenta del gobierno.
Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, desde Oaxaca, soy Vladimir Flores.
