Algunos hablan de justicia poética y otros afirman que son las consecuencias lógicas de la conducta de Greg Abbott, el gobernador de Texas, que se ha contagiado con el Covid-19, a pesar de estar completamente vacunado. Tras haber concurrido el lunes a un evento político bajo techo con más de 600 personas, la mayoría sin usar cubrebocas ni guardar la sana distancia en un mitin republicano en el condado de Collin, al norte de Dallas. Ahora Abbott será aislado en la Mansión del Gobernador mientras recibe tratamiento con anticuerpos monoclonales, lo que puede ayudar a los pacientes que corren el riesgo de enfermarse gravemente.
De la redacción
Como se recordará, el gobenrador republicano de Texas, Greg Abbott se ha opuesto férreamente a los mandatos para el uso de los cubrebocas y a las vacunas, en medio de la aparición de dos agresivas y más contagiosas variantes del coronavirus, la Delta y la Delta Plus, según sugieren datos que demuestran que las nuevas infecciones representan un porcentaje cada vez mayor de las hospitalizaciones en Estados Unidos.
Según el Texas Tribune, «El gobernador ha estado realizando pruebas –de covid- a diario, y hoy (lunes) fue el primer resultado positivo de la prueba», dijo Mark Miner, vocero del gobernador. «El gobernador Abbott está en constante comunicación con su personal, jefes de agencias y funcionarios gubernamentales para garantizar que el gobierno estatal continúe funcionando sin problemas y de manera eficiente», dijo Miner.
Y agregó que «todas las personas con las que el gobernador ha estado en estrecho contacto, han sido informadas de su prueba positiva», lo que resulta increíble porque al parecer en el evento no había un registro con los nombres de los cientos de personas que atendieron al mitin, dijo la televisión. Además, la primera dama, Cecilia Abbott, dio negativo también.
Abbott abordó el tema de su diagnóstico en un video publicado en su cuenta de Twitter. Y aproximadamente dos horas y media después del anuncio de su oficina, Miner reiteró que Abbott no sentía ningún síntoma y sugirió que “una de las razones podría ser el hecho de que el gobernador está vacunado”. Según la cadena MSNBC, que monitorea los movimientos de Abbott, “el gobernador texano hacía todo lo posible para aparentar que estaba bien”.
Abbott recibió su primera inyección a fines del año pasado y se sabe que la vacuna previene casos graves. La prueba positiva de Abbott se produce cuando la pandemia de coronavirus está arrasando Texas nuevamente, “con nuevos casos diarios y hospitalizaciones que alcanzan niveles no vistos desde la última ola en el invierno”, dice el Tribune.
El gobernador ha recibido atención nacional por su negativa a permitir que los gobiernos locales y los distritos escolares impongan máscaras o vacunas, y ha dicho públicamente que penalizará a los maestros y distritos escolares que no obedezcan su orden de no exigir el uso de los cubrebocas en las escuelas en este regreso a clases.
Entre tanto, trascendió que la mayoría de las nuevas infecciones está recayendo en los niños y jóvenes adultos, y que Texas, con el mayor y más sofisticado sistema de hospitales atraviesa ya por una escasez de camas, unidades de cuidados intensivos y personal médico y de enfermeras.
Los indicadores de la pandemia en Texas han aumentado considerablemente. El estado reportó 5 mil 343 casos nuevos el lunes, y 11 mil 791 hospitalizaciones, así como la tasa de positividad, que fue del 17.8% el domingo, concluye la fuente■