Samuel Orozco
Director de Noticias de Radio Bilingüe
Con la novedad de que la administración Trump decidió hoy poner fin a los permisos de residencia provisional que amparan a unos 200 mil salvadoreños que llegaron al país en 2001, refugiados de terremotos que devastaron su país.
Según carta enviada por el Departamento de Seguridad Nacional al Congreso, la autoridad migratoria notificará a los salvadoreños que tendrán como plazo hasta el 9 de septiembre del 2019 para salir del país o bien para encontrar otra forma de residencia legal.
Se dice que la secretaria del Departamento de Seguridad Interior (DHS), Kirstjen Nielsen considera que las condiciones en El Salvador han mejorado de manera notable, razón por la cual no se justifica seguir con la protección que les brinda el Programa de Protección Temporal (TPS).
En la carta se advierte que “sólo el Congreso puede legislar una solución permanente para aquellos que actualmente están protegidos por el TPS”, y se agrega: “La dilación de 18 meses antes de que termine el programa dará al Congreso tiempo de trabajar una potencial solución legislativa”.
Organizaciones pro inmigrantes condenaron de inmediato la decisión como “cruel y despiadada”. La agrupación CHIRLA, de derechos de los inmigrantes en Los Ángeles manifiesta que “estas familias tendrán que regresar a un país del que huyeron hace más de 20 años y enfrentar violencia, pobreza y hasta la muerte”. Y concluyen: “el Congreso tiene la responsabilidad moral y política de corregir esta devastadora equivocación”. Por su parte, la coalición nacional People for the American Way sostiene que esta orden federal “desgarrará a familias y comunidades enteras y es motivada nada más que por xenofobia y resentimiento racial”■