De la redacción
Casilla electoral con afluencia de votantes latinos. Foto: BillMoyers.com
Viejos seguidores y colaboradores de Trump se lanzan a la caza de nuevos votantes e insisten en la existencia de electores fraudulentos “que ayudan a candidatos demócratas a ganar elecciones”. Es decir, los partidarios de Trump han lanzado un nuevo intento para suprimir el voto de latinos y otras minorías.
Este otro esfuerzo por alentar a nuevos votantes en algunas partes rurales del país que apoyaron a Trump en las pasadas elecciones presidenciales, “buscan detener lo que afirman son votos ilegales en las demarcaciones demócratas”.
Para lograrlos, los partidarios del presidente han comenzado a formar un grupo llamado “Look Ahead America” (Mira hacia adelante Estados Unidos), con el fin de identificar a los «descontentos de las zonas rurales y los estadunidenses de clase trabajadora que no votan o no están en los padrones electorales”, para registrarlos y movilizarlos en futuras elecciones, “y conseguir posibles donantes” basados en estos nuevos números de un potencialmente nuevo padrón electoral.
Entre otras de las tácticas que impulsaría Look Ahead America está también “desalentar o invalidar los votos ‘fraudulentos’ mediante el despliegue de ‘observadores’ electorales con cámaras”, y a través de lo que llamaron “una investigación forense” del -presunto- fraude electoral para identificar a “los votos emitidos en nombre de las personas fallecidas, o –léase- los inmigrantes ‘ilegales’ no ciudadanos”. Detalles de este nuevo intento de supresión del voto fueron compartidos par la nueva agrupación con The New York Times.
Sin embargo, afirma la fuente, “los republicanos se han quedado atrás de los demócratas durante años cuando se trata de registrar nuevos votantes”. Y esto se debe, en parte, a que “es más eficiente hacer el contacto personal necesario para completar las inscripciones en las áreas urbanas liberales donde las personas viven más cerca que en áreas más exuberantes y rurales”.
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