Hace tres años la ciudad de Seattle pasó a ser la primera gran ciudad de la nación en aprobar un salario mínimo de 15 dólares la hora. Los opositores a la medida pronosticaron que la economía se estancaría, se perderían trabajos y habría cierre de negocios. A dos años de que los aumentos entraron gradualmente en vigor, dos universidades han estudiado sus efectos y han llegado a distintas conclusiones. Según la Universidad de Berkeley, el aumento ha logrado mejorar el pago a trabajadores de restaurantes sin costar trabajos; en cambio, la Universidad de Washington sugiere que el aumento ha causado una merma al ingreso de los demás trabajadores de bajos salarios. José Luís Buen Abad habló con la dueña y una trabajadora de una empresa de comida y con el director de uno de los estudios y nos reporta desde Seattle.
Se escucha sonido ambiente del interior de un negocio…
Lendy Hansley abrió en Seattle su negocio de comida para banquetes hace 16 años. Emplea hasta 50 personas en el verano, la mayoría inmigrantes latinos.
“I think people are scare. Small business owners are scare” (Creo que la gente está asustada. Dueños de negocios están asustados)
Lendy siguió con atención y escepticismo la aprobación de la ordenanza que aumentó gradualmente, según el número de empleados, el salario mínimo de 9.47 a 15 dólares la hora. Seattle fue la primera ciudad que aprobó este controversial aumento. Muchos empresarios estaban nerviosos.
“No anticipaban lo que iba a pasar, yo creo que para la mayoría de la gente sí funcionó”
Tres años después no sucedió la catástrofe anunciada. La empresa de Lendy se mantiene muy ocupada. Afirma que a sus empleados les paga cuando menos 19 dólares la hora, y algunos cocineros ganan aún más. Pero para Lendy el obstáculo más grande es la escasez de mano de obra.
“Hay escases de trabajadores, particularmente en los servicios de comida en Seattle, y eso tiene un impacto mucho mayor en los salarios. No hay cocineros suficientes”
Sonido de fondo de la cocina…
El aumento salarial fue bien recibido por los trabajadores, pero tiene sus detalles.
“Yo siento que cada que suben el salario mínimo aumentan las cosas, es como un juego tonto. Que padre que gano quince pero gasto un montón…”, dice Ruth Darnell.
Ruth Darnell llegó de Guadalajara, México hace 5 años y ahora es chef. Sus hijos ya crecieron y vive con su esposo que también trabaja todo el día. Seattle es una ciudad muy cara. El valor promedio de una casa se duplicó en 5 años; es de 700 mil dólares. El año pasado la renta promedio de un departamento con dos recámaras fue de poco más de 2 mil 200 dólares.
“Yo no sé cómo le hacen otras personas para vivir. Para nosotros es una ilusión. Nosotros no vamos de shopping, no salimos mucho, no viajamos. Como no tenemos gastos, deberíamos tener una mejor vida…”
Según un estudio de la universidad de Berkeley el aumento ha beneficiado a los trabajadores sin costar perdida de trabajos, y sin embargo otro estudio encomendado por las autoridades de Seattle a la Universidad de Washington llegó a conclusiones diferentes.
Jacob Vigdor, profesor de economía y director del estudio, afirma que el primer año no hubo cambios:
“Pero el segundo incremento en 2016 encontramos que los salario aumentaron en 3 por ciento en promedio y las horas se redujeron el 9%…”
En otras palabras, los trabajadores sufrieron una baja en sus ingresos mientras que el 2015 la industria restaurantera tuvo ganancias de 746 mil millones de dólares.
Se escucha voz del alcalde de Seattle…
El alcalde de Seattle, Ed Murray celebró a fines de junio el tercer aniversario de la firma de la ordenanza señalando que no sucedió la catástrofe anunciada por los opositores.
“En lugar de eso, hemos visto el crecimiento de la industria restaurantera y un incremento en los empleos. Del lado de los consumidores, las ventas en restaurantes y tiendas se dispararon el año pasado hasta los seis mil millones de dólares y este año acercándose a los 8 mil millones de dólares”, dijo Murray.
Murray destacó que en los últimos dos años el desempleo se redujo al 2.6%. El ingreso promedio es de más de 80 mil dólares y tan sólo el año pasado la industria restaurantera, que es la que más crece, empleó a más de 33 mil trabajadores.
Sin embargo, el debate sobre los beneficios de aumentar el salario mínimo a 15 dólares la hora sigue candente en todo el país.
Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, desde Seattle, Washington, Audio, Texto y Foto de José Luís Buen Abad.