Casi todos los cargos de abuso de poder en el caso del Departamento de Justicia contra el sheriff Joe Arpaio del Condado Maricopa en Arizona concluyeron con un acuerdo legal en el que Arpaio no admite responsabilidad. Aún está pendiente un caso separado que acusa a Arpaio de desacato por desobedecer las órdenes de la corte federal. Valeria Fernández tiene más detalles desde Phoenix.
El 17 de julio miles de personas protestaron contra el Sheriff Arpaio en el marco de la Convención de Netroots. Foto: Valeria Fernández.
La decisión del gobierno federal fue recibida como una bofetada en la cara para los críticos del sheriff Joe Arpaio, quienes esperaban testificar en un juicio donde se lo acusaba de arrestar e intimidar a quienes lo confrontaron políticamente. Entre estos el activista Salvador Reza.
“No me sorprende porque el Departamento de Justicia en realidad lo único que quiere es concluir este caso, salirse, para ellos es un “hot potato” como dicen en inglés”, dijo Reza.
Reza afirma que fue la decisión de concluir el caso fue una estrategia de la administración de Obama para evitar polarizar al sector anti-inmigrante, que defiende a Arpaio, antes de las elecciones presidenciales. El ex senador demócrata Alfredo Gutiérrez protestó la decisión, asegurando que había demasiadas evidencias en contra del Sheriff.
“El gobierno federal debiera haber seguido con cargos criminales en contra de él, y llegar al punto de que francamente fuera a la cárcel”, dijo Gutiérrez.
El caso incluía una larga saga de acusaciones de arrestos, intimidación y represalias por parte de la oficina del sheriff contra personas que lo criticaron, incluyendo a periodistas, activistas, políticos y hasta un juez.
El activista Salvador Reza fue arrestado en el 2010 en la acera de enfrente de un edificio del sheriff mientras se encontraba parado en medio de una protesta.
En la protesta contra Arpaio, una de las demandas fue que las autoridades de inmigración dejen de estar presentes en las carceles. Foto: Valeria Fernández.
“Él lo hizo sin razón, simple y sencillamente para darme una lección. Y para intimidarme para que no siguiera haciendo lo que yo hago», dijo Reza.
Como parte de la demanda, el Departamento de Justicia tambien llegó a un acuerdo con el sheriff sobre el acceso a servicios de idioma espaniol en sus carceles y las redadas en sitios de empleo, sobre los cuales hará un ajuste en sus políticas. Pero aún queda por resolverse como se remediará el caso de discriminación contra los conductores latinos detenidos por oficiales del sheriff.
En entrevista, Arpaio dijo que el reciente acuerdo con el Departamento de Justicia le parece “fantástico.” Pero se rehusó a hablar sobre otro caso pendiente.
“Le he dicho una y otra vez, se trata de la corte federal. No voy a tratar de usar los medios durante este procedimiento. Me está haciendo preguntas que no debe hacer”, dijo Arpaio en inglés.
Protestan en las calles de Phoenix. Foto: Valeria Fernández.
El juez Murray Snow inició un proceso judicial contra el sheriff por haber desacatado sus órdenes que prohibían la detención de personas sólo por la sospecha de estar ilegalmente en el país. Snow advirtió a Arpaio que podría enfrentar cargos criminales.
Algunos críticos de Arpaio apuestan a la decisión del juez para encontrar justicia. Otros planean seguir protestando y presionando públicamente para su renuncia sin temor a represalias.
Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, desde Phoenix, Arizona, yo soy Valeria Fernández.
