De La Redacción
El Ayuntamiento de Emeryville vota por unanimidad elevar el Salario Mínimo al más alto nivel en la nación, a través de un consenso entre la comunidad, los trabajadores, las pequeñas empresas, y el gobierno, como parte del movimiento nacional para Levantar el Salario de los Trabajadores de Bajos Ingresos y abordar la inequidad en el ingreso, dice un comunicado de prensa de una coalición de líderes comunitarios, religiosos, sindicales y de dueños de pequeños negcios.
Citando razones de sentido común, como la carestía de la vida y la desigualdad en el ingreso de los trabajadores, entre otras, el Concejo Municipal y la alcaldesa de Emeryville, California, Ruth Atkin, propusieron una medida que aumenta el salario mínimo a 12 dólares con 25 centavos la hora, que será promulgada en ley y entrará en vigor a partir del próximo 1 de julio, luego de una lectura de procedimiento final de la ordenanza este 19 de mayo.
Tras el anuncio, Ruth Atkin declaró que «Con la desigualdad de ingresos fuera de control, tenemos que levantar el suelo para los trabajadores de bajos salarios, por lo que si usted trabaja a tiempo completo, no necesite de la asistencia pública»; y agregó que se trata de “una política de bienestar común”.
Y es que miembros de la referida coalición acordaron por consenso la necesidad de elevar los ingresos de los trabajadores, aduciendo que aumentar el salario pondrá más dinero en su bolsillo y los convertirá en sujetos con mayor poder adquisitivo. Esto se traduce, sostienen, en una inyección para la economía local, pues se presume que con más dinero las personas gastarán más.
La ordenanza de Emeryville, que entrará en vigor este 1 de julio consiste en un aumento salarial de 12 dólares con 25 centavos la hora para los empleados de pequeños negocios, con vías a convertirse en 15 dólares en 2018; y para grandes empresas con más de 55 trabajadores, como IKEA, que registró ganancias el año pasado por un monto de tres mil 700 millones de dólares, el aumento alcanzará este primero de julio los 14 dólares con 44 centavos la hora. Ambas tasas salariales convergerán en los 16 dólares la hora en 2019, lo que convertirá este aumento salarial en la mayor registrado hasta el momento. Además dicha ley estipula que los trabajadores podrán gozar de 6 a 9 días pagados por enfermedad.
Emeryville es la última ciudad en el área de La Bahía que alcanza los 15 dólares la hora, dentro de un movimiento nacional –Levantar el Salario Mínimo de los Trabajadores de Bajos Ingresos- que se inició en la industria de la comida rápida. La votación de Emeryville, no obstante, surgió de situaciones similares en las ciudades vecinas de Berkeley y Richmond, que también buscan elevar el salario de sus trabajadores. En noviembre pasado por ejemplo, el 82 por ciento de los votantes de Oakland y el 78% de los votantes de San Francisco aprobaron un aumento al salario para emparejar las desigualdades de ingresos de los trabajadores y amortiguar un poco los efectos del alto costo de la vida en la región. Lo novedoso de estas medidas es que la decisión vino por la vía del referendo o de la boleta electoral.
El liderazgo asumido por Emeryville contribuye a apuntalar las bases de un movimiento laboral por el aumento salarial que comienza a cobrar fuerza en el nivel nacional. Como ha ocurrido recientemente en Oregon y Washington, entre otros estados. En días pasados la Asamblea Estatal de Nueva York aprobó por miera vez una propuesta de ley que aumenta el salario mínimo a 15 dólares por hora para todos los trabajadores del estado.
La aprobación de esta ley por parte de dicha Asamblea Estatal es resultado de una vigorosa movilización de decenas de miles de trabajadores de bajaos ingresos y miembros de sus comunidades; así como de líderes sindicales y el movimiento nacional por los 15 dólares la hora, de los trabajadores de establecimientos de comida rápida y sus aliados. Ahora le toca al Senado Estatal de Nueva York ponerse a la altura de las circunstancias, y el gobernador, Andrew Cuomo ha dicho que firmaría la ley.
De vuelta al área de La Bahía, más de 19 mil trabajadores en Oakland y San Francisco ganaron un aumento salarial gracias a las iniciativas que triunfaron en las votaciones de noviembre. Como resultado de estos sendos triunfos se transfirieron unos 500 millones de dólares a los bolsillos de los trabajadores, que se presume, por lo menos en una buena parte, fueron a parar a las economías de los comercios del área, redundando en un crecimiento de la economía local. La referida coalición del movimiento nacional Levantar el Salario, en su capítulo de La Bahía de San Francisco sostiene que más de la mitad de los trabajadores de grupos minoritarios o “de color” recibieron un aumento salarial■
Miembros de la alianza:
Alliance for a Sustainable Economy (EBASE), East Bay Organizing Committee (Fast Food Fight for $15), Restaurant Opportunities Center (ROC), SEIU 1021, SEIU ULTCW, Street Level Health Project, and UNITE HERE 2850. 78% of San Francisco voters supported Proposition J, sponsored by the Campaign for a Fair Economy, made up of SEIU 1021, the San Francisco Labor Council, UNITE HERE Local 2, the California Nurses Association, Jobs with Justice, the Alliance of Californians for Community Empowerment (ACCE), the Progressive Worker Alliance, Chinese Progressive Association, Young Workers United, and SF Rising.
Contacto: Beth Trimarco 510-760-4202