De la redacción
Millones de inquilinos que estaban protegidos por la Ley CARES contra el desalojo de vivienda ya no lo estarán a partir de lunes 24 de agosto, sin que se sepa exactamente cuándo, o en qué forma podría ocurrir una nueva moratoria a dichos desalojos. Esto se suma a la crisis de desempleo que sufren 30 millones de trabajadores en Estados Unidos por efecto de la pandemia de Covid-19. ¿Cómo saber si usted es afectado y qué recursos hay a la mano para luchar contra un desalojo? Van aquí lagunas cosas que puede hacer.
Unos 30 millones de estadunidenses perdieron además del trabajo los 600 dólares semanales de la ayuda por desempleo contenidos en la Ley CARES, que duerme inmaculada desde hace tres meses en el escritorio del senador Mitch McConnell. Además, los 400 dólares por semana asignados por el memorando ejecutivo del presidente Trump simplemente no terminan por aparecer.
De acuerdo con el sitio de análisis económico, Statista, hasta finales de julio el 40 por ciento de los inquilinos en viviendas de alquiler en Estados Unidos estarían en riesgo de ser desalojados en los próximos meses. Lo que el Instituto Aspen estima en 30 a 40 millones de personas bajo dicho riesgo, en medio de la peor crisis de salud pública del siglo, la pandemia de Covid-19, que a su vez ha generado la peor crisis económica desde la Gran Depresión de 1929-30.
El Instituto Aspen es una organización no partidista que reúne a líderes de pensamiento, artistas, académicos y miembros del público en general, y senala que los 40 millones de estadunidenses que podrían perder su vivienda como resultado de las protecciones de desalojo caducas, “Eso es el 12 por ciento de la población total de Estados Unidos”.
Ante este sombrío panorama el 11 de agosto Trump firmó una “ley” sobre los desalojos, que en realidad no es sino una orden ejecutiva que no renueva las protecciones de desalojo como anuncia su título con lenguaje por demás confuso; y que no deja claro cuándo o en qué forma podría ocurrir una nueva moratoria. Tampoco garantiza un paquete de estímulo económico para el futuro inmediato, dice c/net en su sitio web.
Dicha orden ejecutiva de Trump estipula cuatro pasos de acción del gobierno, ninguno de los cuales detendrá realmente los desalojos de inmediato. Veamos:
- Investiga si es necesario detener los desalojos como una forma de ayudar a evitar que el coronavirus se propague, presumiblemente de personas que cruzan las fronteras estatales en busca de nuevas viviendas, comparten viviendas con otros o se mudan a refugios.
- Identifica formas de brindar asistencia financiera a inquilinos y propietarios.
- Brinda «asistencia» a varias organizaciones o individuos para ayudar a protegerse contra desalojos y ejecuciones hipotecarias, aunque no está claro si esto incluye ayuda financiera.
- Revisa las «autoridades y recursos» existentes, que podrían incluir programas gubernamentales.
En otras palabras, sin más acciones de la administración Trump o el Congreso, nada ha cambiado realmente, todavía.
Para darse una idea de la complejidad del problema, puede consultar la primera base de datos nacional de desalojos diseñada por Eviction Lab, un equipo con sede en Princeton que además creo un mapa que muestra las tasas de desalojo por estado, condado o incluso por bloque, junto con estadísticas como renta bruta media, pobreza, tarifa o carga del alquiler.
Ahora, ¿cómo saber si la suspensión de desalojo del 24 de agosto se aplica a usted?
- Si vive en una propiedad cubierta por la Ley CARES, los propietarios ahora pueden pedirle legalmente que se vaya y comenzar a cobrar tarifas de alquiler atrasado. Pero lo más pronto que pueden presentar legalmente un desalojo para obligarlo a irse es el 24 de agosto.
- La Ley CARES protegió sólo alrededor de un tercio de las propiedades de alquiler en Estados Unidos. Específicamente aquellas que recibieron fondos federales o fueron financiadas por un programa federal como Fannie Mae o Freddie Mac.
- No está claro si el Congreso ampliará el alcance de las propiedades cubiertas por alguna nueva ley o qué limitaciones podrían imponer los departamentos de Hacienda o Vivienda a cualquier orden que provenga de ellos.
- Aquí es donde las cosas se complican: si su arrendador es dueño de su edificio o financió la propiedad sin pasar por un puñado de programas federales que garantizan la mayoría de las hipotecas y no recibe ninguna ayuda del gobierno, como el dinero de la Sección 8, la Ley CARES no ampara su situación.
No obstante, existe una herramienta publicada y diseñada por la Coalición Nacional de Vivienda para Personas con Bajos Ingresos, que sirve para informarle si la propiedad donde vive estaba cubierta por la Ley CARES. Intente ingresar su código postal y desplazarse por la lista de propiedades en busca de la suya.
Nota: El hecho de que su edificio no esté en la lista no significa necesariamente que no esté cubierto por la Ley CAres: la herramienta sólo rastrea propiedades con cinco o más unidades y es posible que ni siquiera cubra todas. Por lo tanto, si alquila una casa unifamiliar o un apartamento en un edificio con cuatro o menos unidades, es posible que no aparezca en la lista, incluso si la propiedad está incluida en la Ley CARES■